Los resguarda la fiscalía de Carrillo Prieto, que indagará sobre torturas en el lugar
Rescatan documentos de antigua sede de la Dirección Federal de Seguridad
VICTOR BALLINAS
Quince días después de que varios ciudadanos tomaron las instalaciones de Plaza de República 20, antigua sede de la Dirección Federal de Seguridad (DFS), donde aseguraron que "habían sido torturados", varios empleados de la Fiscalía Especial para Asuntos Sociales y Políticos del Pasado se presentaron ayer al inmueble para rescatar la documentación que ahí se encontraba, que a partir de ese momento quedó bajo su resguardo.
En ese lugar, asegura Marco Rascón, elementos de la DFS torturaban a opositores al régimen gobernante. El primero de mayo de 1985, agrega, durante los actos oficiales del Día del Trabajo, en la Alameda Central, un grupo de personas vestidas de civil realizó detenciones.
"El de la voz -se asienta en la denuncia- fue detenido en el cruce del Eje Central Lázaro Cárdenas y Madero en forma violenta; 10 personas lo sometieron y lo subieron a una camioneta tipo panel; arriba del vehículo, donde había más personas, le ordenaron que se pusiera boca abajo; por tal motivo no podía ver el camino, pero la camioneta realizó un recorrido de 10 minutos aproximadamente, y que podría suponer que fue cambiado de vehículo. En ese nuevo vehículo avanzó tres minutos y antes de bajarlo del vehículo le pusieron una capucha.
"No vio adonde llegaron -continúa Rascón en su denuncia-, pero al lugar donde ingresamos fui desnudado; a los pocos minutos se le ordenó dar su nombre, posteriormente fue conducido a un elevador, siempre con la capucha puesta, la cual impedía ver alrededor, al llegar a uno de los pisos superiores, se le obligó a tomar asiento, y empezó a ser golpeado.
"Los golpes eran en la cara, en el estómago, en las piernas, en diversas partes del cuerpo, a la vez que le decían 'revela dónde están las bombas contra el presidente'."
Ante el fiscal especial, Ignacio Carrillo Prieto, el 5 de noviembre Rascón "compareció y señaló que tenía antecedentes penales por los asaltos bancarios de enero de 1972 en Chihuahua, y que efectivamente era comunista, pero que era un ciudadano con derechos políticos vigentes, pero que los golpeadores y torturadores le replicaban que su intención era realizar actos terroristas contra el Presidente de la República, por lo que continuaron los golpes y los gritos durante varios horas. En ese mismo lugar lograba escuchar voces y gritos de dolor de otras personas que eran torturadas".
Aseguró que estuvo cuatro días secuestrado y que al quinto día lo llevaron a la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal, de donde fue trasladado al Reclusorio Oriente.
Rascón, Juan Moreno Pérez, Osvaldo Cantú, Fernando Pineda y otras personas tomaron hace 15 días las instalaciones en que aseguran fueron detenidos y torturados por elementos de la desaparecida DFS. Pineda no se presentó ayer y quedó pendiente su denuncia en la que sostiene que "Miguel Nazar Haro lo torturó. Que él lo vio, porque no estuvo vendado, cuando Nazar Haro sacó de su cajón un cable para aplicarle toques eléctricos".