Se viene abajo el proceso del SNTE en Michoacán

Dos candidatos desconocen la elección del magisterio

"Fue un asalto a la democracia", dicen los inconformes

CLAUDIA HERRERA BELTRAN Y ERNESTO MARTINEZ ENVIADA Y CORRESPONSAL

Morelia, Mich., 7 de noviembre. De "asalto a la democracia" calificaron la elección magisterial dos de los cuatro candidatos que participaron y terminaron por desconocer el proceso en la sección 18 del SNTE, en el que se declaró ganador a Juan Manuel Macedo Negrete.

Urnas embarazadas, operación carrusel, acarreo de electores, votaciones sin identificación en formas fotocopiadas y sin la aplicación de la tinta indeleble fueron muestras de las irregularidades que enumeraron Heriberto Macías y José Villagómez.

La primera elección que los dirigentes del sindicato magisterial presentaron como histórica y ejemplo de democracia estuvo tan viciada, dijeron, que en ningún momento pudieron entregar sus impugnaciones. Nunca se instaló el comité nacional electoral y el conteo de votos y todo lo referente al proceso fue secreto.

Dos horas antes de esas declaraciones, la representante del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) en los comicios, Sanjuana Cerda Franco, había presentado a Macedo como triunfador con 6 mil 305 sufragios, que representaban 40 por ciento de la votación.

Para la corriente "democrática", que no aceptó participar en el proceso electoral, esta es la muestra de que el SNTE orquestó un "circo" y finalmente quedó un candidato "a modo" que, según el disidente Juan Pérez Medina, está ligado al ex gobernador Víctor Manuel Tinoco Rubí.

Los dirigentes del SNTE celebraron el resultado de las elecciones en voz de Cerda Franco. Según sus números, habían acudido a votar 15 mil 881 de los 53 mil profesores que estaban registrados en la nómina, lo que calificó de "fiesta democrática con resultado irreversible".

Sin embargo, en la improvisada conferencia de prensa, a la que no asistieron los dos candidatos inconformes, la enviada del SNTE nunca mencionó que estos habían impugnado el proceso e insistió en que el resultado era "válido y legal", porque hasta ese momento se había computado 95 por ciento de las casillas.

Como si todo hubiera transcurrido con normalidad, explicó que Macías había quedado en segundo lugar con 3 mil 364 votos (21.86 por ciento); Villagómez en tercero con 3 mil 300 sufragios (21.44 por ciento) y Chávez en cuarta posición con 2 mil 417 votos (15.7 por ciento).

A pregunta expresa sobre la posible impugnación, recordó que los cuatro candidatos habían firmado un compromiso en el que aceptaban reconocer los resultados y sumarse al ganador. "Y no me queda duda de la madurez y del compromiso que ellos asumieron al momento de registrarse y que reiteradamente hicieron público". Pero desde las cinco de la tarde, Macías calificó las elecciones de fraudulentas.

Incertidumbre y trascendidos

El panorama conflictivo comenzó a dibujarse desde la tarde del miércoles. En medio de la confusión por las protestas de los maestros de la corriente "democrática" que no participaron en el proceso electoral y los fuertes dispositivos de seguridad, se prestaba poca atención a lo que ocurría en las casillas, cuyos representantes comenzaron a denunciar irregularidades sin que los candidatos hablaran públicamente al respecto. Todos callaron.

Luego hubo un juego de declaraciones y desmentidos. Por la tarde, Macedo ya se declaraba triunfador, lo que provocó que Macías asegurara que él llevaba la delantera. Repentinamente, las televisoras recibieron la orden de no dar a conocer las posiciones de los candidatos.

El tiempo transcurrió y no había noticias del conteo de votos ni de la instalación del comité electoral hasta que, en la madrugada, Sanjuana Cerda salió a dar una conferencia de prensa diciendo que no había resultados oficiales y que lo mejor era esperar. Dijo que no tenía noticias de impugnaciones y defendió en todo momento la "limpieza" del proceso.

En la madrugada, los candidatos tuvieron una encerrona con los operadores del SNTE. Macías y Villagómez exigieron que se limpiara el proceso, pero hasta ese momento no lo habían descalificado.

La mañana del jueves los aspirantes todavía guardaron silencio. En el SNTE siguió privando el hermetismo. Nadie sabía nada sobre los resultados pese a que Cerda Franco había ofrecido unas horas antes que habría una conferencia de prensa a mediodía.

Pero el problema se desató cuando el SNTE comenzó a filtrar que Macedo llevaba la delantera y Macías había quedado en tercer lugar. A las tres de la tarde, todos, incluidos funcionarios de alto nivel del gobierno local, ya manejaban que Macedo era el ganador.

Este escenario rompió con las versiones previas. Los disidentes acusaron a Macías, de filiación perredista, de haber sido apoyado por el gobierno estatal y de que en un acuerdo con el SNTE iba a ser designado secretario general. Aurelio Chávez y Villagómez se habían presentado a este proceso como "institucionales".

Enterado de la información, Macías "tronó" contra los representantes del SNTE. Comentó a este diario que fue invitado a una reunión a las 10 de la mañana para el reparto de las carteras sin importar los resultados de la votación. "Tienen prisa por declarar un ganador y no quieren revisar las impugnaciones."

De súbito el SNTE convocó a conferencia de prensa pero no avisó a todos los medios de comunicación. Reporteros de periódicos de circulación nacional, que habían sido invitados por el sindicato magisterial, tampoco estuvieron presentes, porque precisamente cinco minutos antes de que se iniciara el acto fueron llevados al aeropuerto debido a que "estaba a punto de salir" su avión.

Fue cuando Cerda Franco, acompañada de los candidatos Macedo y Chávez y de otros enviados del SNTE, comenzó a dar la conferencia de prensa. Anunció los resultados y ante la insistencia de estos reporteros sobre las irregularidades y la posibilidad del desconocimiento del proceso, respondió: "Desconozco esas anomalías. Fue un resultado contundente, se respetó la voluntad de los compañeros".

Macedo después se declaró triunfador y anunció que iba a convocar a las corrientes a platicar y a integrarse en un "proyecto plural, abierto e incluyente". Se le preguntó por qué Macías y Villagómez no estuvieron en la rueda de prensa: "Lo desconozco, cada quien tenía sus actividades".

Pero dos horas después se supo que la postura de sus opositores era otra. Convocaron a conferencia de prensa. Villagómez mencionó el caso de las casillas que se instalaron en el instituto España México, en Morelia.

"Se dio una serie de anomalías con una votación tremenda que todos los compañeros que estuvieron ahí observaron; integrantes de una planilla portaban las boletas y se comenzaban a distribuir, no hubo voto secreto. Hay gente que asegura que sufragó dos o tres veces, que se recogieron en diversas urnas y que nadie supo adónde las llevaron", relató.

Heriberto Macías expuso: "Nunca hubo la posibilidad de confrontar las actas, nosotros proponíamos que pudiéramos estar revisando acta por acta dado que había una serie de irregularidades. Por ejemplo en Zitácuaro se entregaron 80 votos y aparecieron mil 900 al final". Refirió que hubo lugares donde no se supo quién votó, pero todo salió en favor de Macedo.

Villagómez insistió: "Las campañas se dieron con altura y no debieron ser empañadas con un proceso truculento, sucio, maquiavélico", y luego dijo que va a insistir en las impugnaciones.

Pero Macías reconoció que ya no había mucho que hacer. "Fue un asalto a la democracia", expresaron.