Programa para el control de drogas reconoce aumento en el consumo
Prevé el gobierno reformas sobre tenencia de la tierra que se utilice para cultivar enervantes
GUSTAVO CASTILLO
El Programa Nacional para el Control de Drogas 2001-2006 advierte sobre la expansión de cultivos de enervantes en México y la consolidación de economías regionales y locales que tienen sustento en el narcotráfico, independientemente de la obtención "de resultados óptimos" en la erradicación de plantíos ilícitos.
El documento plantea que se desarrollarán políticas y planes estratégicos de mediano y largo plazos, para "complementar las acciones de erradicación con programas de combate a la pobreza y acciones de fomento productivo y apoyos diferenciados de acuerdo con la potencialidad de cada región".
El gobierno federal señala que se buscarán reformas al artículo 27 constitucional respecto de la tenencia de la tierra que sea utilizada para el cultivo de enervantes; sin embargo, no precisa qué tipo de modificaciones legislativas buscará que se realicen.
En este programa, el cual fue dado a conocer el pasado lunes por el presidente Vicente Fox y el procurador general Rafael Macedo de la Concha, se establece que las distintas instancias gubernamentales formarán "cuadros especializados para intercepción mixta, que participen en operaciones marítimas, terrestres y aéreas de combate al narcotráfico", además de que tanto las autoridades municipales como estatales y federales participarán en la destrucción de pistas clandestinas que sirven para el descenso de aeronaves cargadas de enervantes.
Aunque -reconoce el documento- no se dispone de información oficial respecto al consumo de estupefacientes a nivel nacional, la información que se tiene indica algunas tendencias preocupantes que sugieren la persistencia de elevados niveles de uso en los principales mercados de consumo de drogas, así como una diversificación de éstas.
Se detalla que México dejó de ser un país de paso "para ser uno de consumo en aumento, donde las organizaciones delictivas dirigen sus acciones hacia la formación de mercados locales, ubicando la principal demanda en los estados fronterizos con Estados Unidos, en centros turísticos, el Distrito Federal y su zona metropolitana, así como las entidades de la frontera sur".
Sobre el problema de producción de enervantes indica que "las principales regiones con cultivos ilícitos se concentran a lo largo de los sistemas montañosos del país, particularmente en las estribaciones de la Sierra Madre Occidental y la Sierra Madre del Sur, y de forma aislada en algunas zonas de la Sierra Madre Oriental, en su porción sur".