Ya no valen los intereses electorales de grupos
cuando se trata del Centro Histórico, dice
Advierte el GDF a ambulantes que no aceptará
presiones ni chantajes
Comerciantes no han respondido a la propuesta
oficial de reubicación, señala Encinas
Contradicciones entre el funcionario y Ebrard
sobre la utilización de la fuerza pública
ELIA BALTAZAR Y SUSANA GONZALEZ
El Gobierno del Distrito Federal (GDF) no aceptará
presiones ni chantajes de ningún poder informal, advirtió
ayer el jefe del Ejecutivo local, Andrés Manuel López Obrador,
respecto de las acciones que ejercerían organizaciones de comerciantes
ambulantes en el Centro Histórico frente a su próxima reubicación.
De
cara a las elecciones de 2003, aseguró que "ya no valen" los intereses
electorales de ningún grupo cuando se trata del Centro Histórico
o de cualquier tema que signifique el beneficio común.
Dijo: "Ya pasó esa época y el gobierno capitalino
no se dejará chantajear ni presionar por ningún poder informal
que quiera ubicarse por encima de los poderes legalmente constituidos".
Aunque el jefe de Gobierno aseguró que los comerciantes
ambulantes contribuyen y participan en la rehabilitación del Centro
Histórico, así como atienden las razones de su reubicación,
el subsecretario de Gobierno, Alejandro Encinas, afirmó que a la
fecha no ha habido respuesta de los vendedores a la propuesta oficial.
Además, el responsable del programa de reubicación,
el secretario de Seguridad Pública, Marcelo Ebrard, afirmó
de manera contundente que utilizará la fuerza pública contra
los ambulantes que pretendan reinstalarse, aunque antes Alejandro Encinas
había dicho que el gobierno evitaría llegar hasta ese extremo.
Ebrard señaló: "Mi única función
será la de garantizar que las calles rehabilitadas no vuelvan a
ser ocupadas por los ambulantes". Pero a pregunta expresa sobre si utilizaría
la fuerza pública en caso de que quisieran establecerse en el área
restaurada, respondió: "Por supuesto".
Encinas, por su parte, advirtió que a partir del
18 de noviembre no se permitirá la instalación de puestos
ambulantes en las aceras de las 34 manzanas que comprenden el casco urbano
del Centro Histórico, ni se extenderán nuevos permisos.
"El gobierno y la delegación (Cuauhtémoc)
han sido claros, no se va a permitir el comercio ambulante... Vamos a poner
orden y creo que hay que buscar opciones para que los vendedores queden
más cerca de su lugar de origen; no es posible buscar una solución
sólo en el perímetro del Centro Histórico."
Aseguró que las autoridades "pondrán orden"
también en la venta de productos que ofrece el comercio ambulante
en los lugares donde se permita, para evitar "la piratería y la
venta de artículos robados y prohibidos".
Aseguró que sobre las obras que se realizan en
el primer cuadro de la ciudad hay un discurso paradójico, pues siempre
se dijo que invertir en esa zona no representaba buen negocio y ahora se
habla de grandes pérdidas.
"Claro que hay inconformidad y obviamente se van a pagar
costos, pero el resultado será favorable, principalmente para los
comerciantes establecidos", aseguró.
Sobre las inconformidades de estos últimos, Encinas
desestimó la posibilidad de que interpongan una denuncia contra
el GDF por las pérdidas millonarias que, dicen, les han causado
las obras de remodelación del primer cuadro.
Tajante rechazó que el gobierno pueda autorizarles
una exención de impuestos, pues dijo que ya gozan de muchas a escala
local y federal, lo que convierte al Centro Histórico en "un paraíso
fiscal". Y a esto hay que agregar, recordó, que los dueños
de inmuebles recibirán un estímulo adicional, porque las
obras de mejoramiento urbano son financiadas por el GDF.