Violencia y más división entre maestros, los peligros
Hoy, riesgosa elección del magisterio michoacano
Todo apunta a que habrá dos comités de la sección 18
CLAUDIA HERRERA BELTRAN Y ERNESTO MARTINEZ ENVIADA Y CORRESPONSAL
Morelia, Mich., 5 de noviembre. En un ambiente de incertidumbre y con el riesgo de que estalle la violencia, mañana se realizará una elección inusitada en el sindicato magisterial. Resultado de la confrontación, todo apunta a que el jueves habrá dos comités en la sección 18 de Michoacán, uno avalado por la directiva nacional y otro por la disidencia.
Cincuenta y tres mil trabajadores de la educación del estado están convocados a asistir a las urnas en un proceso que está fuera del marco legal del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) y que ha provocado división en los distintos grupos sindicales y políticos de la entidad.
A unas horas de que comience la jornada, el magisterio democrático reiteró que impedirá el desarrollo de los comicios mediante la quema de urnas y la suspensión de clases. También reiteró su exigencia al gobierno estatal de que otorgue el reconocimiento al comité que elegieron la semana pasada; de lo contrario, advirtió a la administración de Lázaro Cárdenas Batel que enfrentará "consecuencias políticas graves".
Mientras tanto, el comité ejecutivo nacional (CEN) del SNTE -organizador de las elecciones- advirtió que aun cuando haya un solo voto validará el proceso, y movilizó a miles de trabajadores por toda la entidad. Juan Pérez Medina, hasta hoy líder sindical estatal, denunció que se trata de "grupos de provocadores" y de operadores de la directiva nacional encargados de "orquestar el fraude".
Frente a este escenario, el secretario de Gobierno de Michoacán, Leonel Godoy, aseguró que los cuerpos de seguridad del estado se mantendrán atentos a cualquier llamado y estarán coordinados con los ayuntamientos para evitar que se rompa la paz pública.
En un recorrido se pudo apreciar que los hoteles y las oficinas donde trabajan los representantes del CEN del SNTE -como el Diana del Bosque- son vigilados por decenas de policías. Sin embargo, Godoy negó que hubiera implantado un operativo de seguridad.
Así, después de una década de enfrentamientos entre disidentes e institucionales, las elecciones en Michoacán son "la prueba de fuego" para ambos grupos.
Focos rojos y cámaras fotográficas
Este martes la logística estaba lista. A pesar de que hace unas semanas el SNTE había previsto que instalaría 8 mil casillas (o sea, en todas las escuelas con más de seis profesores), hoy anunció que sólo habrá mil 478 urnas, y de éstas, poco menos de la mitad en la región de Morelia, y habrá 822 mesas receptoras del voto.
El padrón consta de 53 mil docentes, a cada uno se le van a entregar tres boletas para que puedan elegir al comité ejecutivo seccional (integrado de 32 carteras), a su representante de sector (nueve en el estado) y a su coordinador regional (en total son 20 en la entidad).
De acuerdo con el sector institucional, los municipios de Morelia, Zamora, Uruapan y Lázaro Cárdenas son considerados los "focos rojos", porque en esos lugares podrían darse choques entre los "democráticos" y los simpatizantes de las cuatro planillas que contienden.
Sanjuana Cerda Franco, representante del SNTE en Michoacán, explicó que están preparados para un escenario complicado, en el que "se busque violentar e inhibir el voto mediante las amenazas y la violencia".
Con ese fin, dijo que durante la jornada electoral todos los representantes de casilla estarán listos con cámaras fotográficas y de video para documentar cualquier agresión, sobre todo considerando que hay ocho maestros "democráticos" que recientemente salieron libres bajo fianza y otros que tienen orden de aprehensión; "por lo tanto, si reinciden deben ser detenidos sin pretexto".
Según Cerda Franco, 12 mil 600 personas participarán directamente en el proceso electoral (ya que habrá un presidente, un secretario, un escrutador y representantes de las planillas en cada casilla), además de las "comisiones" del SNTE que comenzaron a llegar desde hace varios días al estado.
Al respecto, Juan Pérez Medina señaló que recibieron información en el sentido de que el CEN instruyó a los 55 comités ejecutivos seccionales del país para que cada uno enviara a 300 representantes a Michoacán, entre los que se encuentran "grupos de choque y provocadores".
No sería la primera vez que estallara la violencia en la entidad. El 10 de octubre pasado en Zitácuaro hubo una gresca entre simpatizantes de Juan Manuel Macedo Negrete, candidato de la planilla Convergencia Sindical, con los "democráticos". No hubo lesionados pero según la
prensa local sí quedaron varios detenidos.
Cuatro días después, en el municipio de Apatzingán, dos maestros resultaron descalabrados y varios con lesiones en un zafarrancho, cuando seguidores de la corriente democrática irrumpieron en un acto de campaña de Heriberto Macías Alejandres de la planilla Un Sindicato para Todos.
Hoy, como medida de presión, centenares de docentes de la corriente democrática se instalaron en plantón frente a la Secretaría de Educación del estado para impedir las votaciones en el lugar. Un centenar de efectivos del Grupo de Operaciones Especiales les impidió el paso.
Con un solo voto serán válidas
En medio de la campaña de "ni una urna en Michoacán" que impulsan los disidentes y que puede significar una baja participación en los comicios, Cerda Franco afirmó que con un solo voto las elecciones serán válidas.
Reconoció que lo más conveniente para "garantizar la credibilidad del proceso" es que asista el mayor número posible de maestros, pero insistió en que no hay mínimos ni máximos de votación. "En elecciones políticas ha habido candidatos que han ganado con 30 por ciento de la votación y nadie los cuestiona", dijo.
Al preguntarle quién va a garantizar la transparencia y la imparcialidad del proceso, luego de que el SNTE carece de reglamentos específicos para este tipo de elecciones, señaló que el proceso será certificado por notario público y por el comité electoral, sólo que este organismo está integrado por militantes de la corriente institucional o por miembros de otras expresiones afines.
No supo dar información sobre el costo de las elecciones, sólo señaló que entregaron recursos en especie a los aspirantes.
El panorama se complica más porque desde la semana pasada el grupo llamado "democrático" eligió su comité ejecutivo, al frente del cual quedó Sergio Espinal, quien es apoyado por un ala del perredismo local, encabezada por Raúl Morón, diputado y ex presidente del partido ligado a la corriente de Mario Saucedo.
Luego de la elección, Espinal se entrevistó con el gobernador Lázaro Cárdenas Batel y con el secretario de Gobierno, Leonel Godoy, quienes intentaron distanciarse del problema del reconocimiento, diciendo que a ellos no les correspondía darlo, y que en todo caso estaban abiertos a conversar con los grupos en pugna.
Sin embargo, esta postura no convence a los distintos bandos. Cerda Franco criticó hoy a la administración estatal y dijo que sus "declaraciones son desafortunadas", porque "el gobierno local es el patrón y está obligado a reconocer a su contraparte". Lamentó que con esta actitud se esté fomentando "la existencia de comités paralelos", como lo hicieron otras administraciones estatales.
Lo mismo reclaman los opositores. Espinal advirtió que si el gobierno se niega a reconocerlos se va a enfrentar al "caos en la administración", porque los docentes no van a aceptar una directiva impuesta por el mando nacional del SNTE. Pérez insistió en que el gobierno está "jugando con dos cartas. No rompe con nosotros, pero está apoyando a Macías (uno de los candidatos)".
En días pasados el gobernador Cárdenas Batel admitió que "Michoacán atraviesa una situación complicada", y salvo que haya un arreglo político de última hora, parece que la confrontación es inevitable.