Sólo permanecerán mil 500 de los casi 3 mil ambulantes que trabajan en la zona
Emprende el Gobierno del DF un programa de restauración del Bosque de Chapultepec
"Absolutamente falso" que se quiera privatizar el centro de recreo, afirma el responsable
MIRNA SERVIN VEGA
De los casi 3 mil comerciantes ambulantes que ocupan espacios en el Bosque de Chapultepec, sólo mil 500, que están empadronados desde administraciones pasadas, conservarán sus espacios, pero de manera regulada.
Los ambulantes tendrán que cumplir normas de salud en la preparación de alimentos, ajustarse al espacio asignado, no invadir al arroyo vehicular, uniformar sus puestos, no ocupar las áreas verdes, no tener giros sin autorización -como la venta de discos piratas- y efectuar el pago previsto en el tabulador por el uso del espacio, explicó el director general de la Unidad de Bosques Urbanos y Educación Ambiental, Fedro Carlos Guillén.
Explicó que se reconoce la tradición de vendimia en esta área verde, sin embargo, como parte del programa de restauración del bosque, los vendedores tendrán que ajustarse al ordenamiento.
Sin embargo, las organizaciones de ambulantes consideran que con este programa "se pretende privatizar el bosque", ya que varios empresarios han invertido en espacios para el comercio.
Al respecto, Carlos Guillén, en entrevista, afirmó que esa versión es "absolutamente falsa", aunque en el bosque, agregó, hay concesiones que prevé la ley, como la de los restaurantes o los juegos mecánicos, que pagan por el espacio al Gobierno del Distrito Federal.
Precisó que se restaurarán espacios ociosos y que pueden ser una fuente de ingreso para el bosque. "En ese sentido, cualquier persona que cumpla la normatividad" puede ocuparlos, dijo, "incluso los ambulantes".
De acuerdo con el funcionario, en el caso de los ambulantes, las ganancias que obtienen son sólo para ellos, ya que aunque existe un padrón, hay un incumplimiento flagrante de las regulaciones y "no hay una contraprestación, a pesar de que en algunos casos sus ingresos son muy considerables".
El funcionario enfatizó que nadie quiere un bosque en mal estado, deteriorado, sucio e inseguro, por lo que este año se han invertido 19 millones de pesos en su restauración, "lo que supera en mil por ciento lo que se había invertido en 30 años". Aclaró que no se pretende polarizar la relación con los ambulantes, "sólo queremos rescatar el bosque para la gente".
Precisó que en el diagnóstico que se hizo de la situación del bosque se encontró un desbordamiento en la invasión de áreas verdes; "incluso en un caso se detectó media hectárea de área verde sobre la que se había echado concreto para poder ampliar los espacios donde vender".
Añadió que se reconoce el derecho que los vendedores informales tienen en el bosque, "pero queremos que sigan ordenamientos elementales que hay que tener en un espacio público de este tipo".
El funcionario refirió que en el programa del gobierno intervienen las secretarías de Medio Ambiente y de Salud, y Protección Civil.
Los ambulantes, subrayó, se han inconformado por la redistribución de los espacios para vender, pero la protección de los visitantes está en primer lugar. "No podemos poner en riesgo a los visitantes a cambio de que ellos tengan un lugar que les dé mayor ingreso". Advirtió que ante la posibilidad de una emergencia en el bosque, que requiera un desalojo, con el ordenamiento actual no sería posible hacerlo con eficacia. "La lógica de protección civil no es desmedida, sólo pone por delante la protección de la gente, y eso es más importante que cualquier otra consideración".