PEMEXGATE

Asegura que Muñoz Leos y el líder petrolero "han establecido un clima de diálogo"

Por buen camino, pláticas con el sindicato: Pemex

Hay condiciones para concluir la negociación, asegura Abascal; comienza la mediación

FABIOLA MARTINEZ

En menos de 12 horas el choque entre el gobierno federal y el gremio petrolero dio un giro total. Petróleos Mexicanos (Pemex) y el Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (STPRM) anunciaron ayer que, "en un marco de respeto y armonía", llevan a cabo las negociaciones de revisión salarial y hasta dijeron que éstas "avanzan por buen camino".

Más allá del discurso oficial, hoy comienza la mediación de la Secretaría del Trabajo y previsión Social (STPS) en el conflicto, se abre el periodo de prehuelga y los tres sectores tendrán que acudir a la audiencia de conciliación en busca de un acuerdo.

En una cuenta regresiva de seis días, plazo restante al emplazamiento a huelga, empresa y sindicato habrían acordado un pacto de no agresión. Incluso en el comunicado emitido por la paraestatal, ésta sostiene que hay un "ambiente de cordialidad y de buena relación" entre Raúl Muñoz Leos, director general de Pemex, y el diputado priísta Carlos Romero Deschamps, quien enfrenta un proceso de desafuero en el Congreso.

Afirma que tanto el directivo como el líder sindical "han establecido un clima de diálogo y esperan que, con la buena voluntad de las partes, se encuentre una salida favorable que culmine con éxito las negociaciones, en beneficio de los trabajadores y sus familias". Sin embargo, el ambiente de "armonía" y la propia realización de las negociaciones no se pudieron constatar, porque desde el 15 de julio, en que comenzó formalmente el proceso de revisión, el lugar de las reuniones se mantuvo en secreto

"Por el bien de México, empresa y sindicato están haciendo su mejor esfuerzo para que en el menor tiempo posible se resuelva la negociación salarial, pues, como ha ocurrido desde la nacionalización de la industria petrolera, Pemex y el sindicato han actuado con responsabilidad y patriotismo para mantener a la empresa en un nivel de clase mundial y que continúe como orgullo de todos los mexicanos", señalaron en su comunicado oficial horas después de que habían arreciado los ataques mutuos.

Por lo pronto, hoy entrará la STPS a mediar en el caso, e incluso las negociaciones se podrían trasladar a esa dependencia, y se prevé que el propio titular, Carlos Abascal Carranza, estará sentado en esa mesa.

El titular de la STPS señaló que "hay condiciones para llegar a culminar la negociación salarial", para dejar este tema de lado y que el resto de la problemática en torno a Pemex se atienda en otras instancias.

"Digo que hay condiciones porque falta el último acto de voluntad, pero las ofertas recíprocas y las demandas están discutidas y atendidas en tiempo y forma, y entonces hoy lo que corresponde, lo que sigue, es culminar un proceso que no tiene por que llegar hasta el límite, ya que generaría alteraciones, volatilidad en los mercados, una serie de daños irreparables, aunque al final se llegara al acuerdo necesario", expuso.

Según el funcionario, las demandas de ambas partes están prácticamente resueltas, y por tanto sólo falta un "acto de voluntad que se puede hacer en un segundo". Añadió que el incremento al tabulador de la plantilla de trabajadores de Pemex será benéfico en términos reales (en el rango del promedio de aumento salarial de este año, que es de 5.5 por ciento), además de que habrá otros beneficios importantes en prestaciones, que de acuerdo con fuentes de la paraestatal alcanzarían 2.5 por ciento adicional.

En tanto, Pemex informó que técnicos y trabajadores de la empresa comenzaron ayer los trabajos para acondicionar nuevamente las instalaciones en la Sonda de Campeche, con el objetivo de restablecer las actividades de producción de hidrocarburos que se suspendieron por el paso del huracán Isidore.

Hace referencia a que con el propósito de asegurar el suministro de gas natural a la mayor parte de sus clientes, redujo sus consumos, mientras que la Comisión Federal de Electricidad sustituyó parcial y temporalmente sus requerimientos de este energético con otros combustibles.

La paraestatal aseguró que con el retorno de los trabajadores a sus centros de trabajo comenzó la normalización de la producción de petróleo crudo y gas natural.