En el Grito de los Excluidos demandan políticas para atender a los marginados
Marchan miles en Brasil en contra del ALCA
Iglesia, sindicatos y organizaciones civiles convocaron a un plebiscito sobre el mecanismo
AFP Y PL
Sao Paulo, 7 de septiembre. Unos 150 mil brasileños, movilizados por 60 organizaciones sindicales y sociales, encabezadas por la Conferencia Nacional de Obispos, expresaron hoy su rechazo al Area de Libre Comercio de las Américas (ALCA).
Decenas de miles de brasileños se manifestaron este sábado conmemorando el Grito de los Excluidos, convocados por la Iglesia y organismos sociales, en demanda de políticas para los pobres y que coincide con el Día de la Independencia.
En Basílica de Aparecida, en el interior del estado de Sao Paulo, participaron 150 mil personas, según los organizadores.
"Brasil está realizando un plebiscito sobre el ALCA; una idea que sería muy buena si la apertura de fronteras fuera igual para todos. Por eso, decimos No al ALCA, por lo menos como está propuesta", afirmó el padre Marcio, de la iglesia Nuestra Señora de los Remedios, en el pequeño pueblo colonial Prati, del litoral de Río de Janeiro, a sus feligreses. El ejemplo de David y Goliat trascendió de la religión cuando el padre Marcio lo aplicó al ALCA.
El plebiscito contra el ALCA en Brasil, del que se espera la participación de 10 millones de brasileños y organizado por la Iglesia, sindicatos y organizaciones sociales, termina este sábado con el cierre de las urnas que funcionarios vigilaron durante toda la semana en más de 3 mil municipios, en los lugares más inusitados: calles, escuelas y hasta paradas de autobuses.
El objetivo del plebiscito fue "incluir a la sociedad en una discusión tan importante, de la que sólo participan los gobiernos", y que persigue la liberación de tarifas en 34 países del continente a partir de 2005, informó a Afp el coordinador Paulo Maldus.
"El ALCA como está propuesto parece muy interesante para Estados Unidos, pero en nada ayudaría en la transición a otro modelo de desarrollo en América Latina", según dijo el asesor de la Conferencia Nacional de Obispos, Pedro Ribeiro.
En Brasil, donde hasta el gobierno critica las barreras comerciales estadunidenses, el tema trasciende a las elecciones presidenciales del 6 de octubre y a los programas de los candidatos que afirman que la negociación continuará si los beneficios son recíprocos.
Pretensiones anexionistas
El izquierdista opositor Partido de los Trabajadores (PT), cuyo candidato, Luiz Inacio Lula da Silva, encabeza las intenciones de voto, afirma en su programa que "no podrá firmar el acuerdo del ALCA si persisten las medidas proteccionistas impuestas por Estados Unidos", las cuales lo convertirían en "un proceso de anexión económica del continente".
El PT fue uno de los organizadores del plebiscito, pero se retiró recientemente para no vincularse con la campaña electoral, aunque inició una promoción informativa paralela bajo el lema "No a la anexión, sí a la integración soberana".
El candidato gubernamental, el socialista José Serra, propone proseguir las negociaciones, aunque con "cautela". Y advirtió que Brasil no debe abrirse más hacia otras regiones, a "menos que haya contrapartidas muy claras".
Ciro Gomes, el opositor de centroizquierda que comparte el segundo lugar con Serra en las encuestas, afirmó que "Brasil entrará en las negociaciones del ALCA sin miedo y sin prisa", repudió "cualquier resultado que no asegure la apertura genuinamente recíproca" y pidió que éste trascienda lo comercial y amplíe "el derecho a trabajar en otros países signatarios".