Sería base para la reforma del Estado: CEPS
Llaman a construir un pacto centrado en la sociedad civil
ALMA E. MUÑOZ
La Comisión Episcopal de Pastoral Social (CEPS) exhortó al gobierno a construir un nuevo pacto, cuyo protagonista sea la sociedad civil, para impulsar una reforma del Estado, que se centre en la defensa de los derechos humanos. Esto, debido a que en México, sostiene, "vivimos un momento de transición marcado por las tendencias de la globalización y hasta el momento no hay resultados".
Lamenta el empobrecimiento del país, critica el trato "denigrante" a los migrantes y las mujeres, además de exigir reformas laborales acordes con las necesidades de los trabajadores y de respeto a los derechos y cultura de los indígenas, como se establece en los acuerdos de San Andrés Larráinzar.
Las propuestas de la CEPS provienen de la declaratoria final de una asamblea nacional de pastoral social celebrada en Guadalajara, del 26 al 29 de agosto, que reunió a obispos, presbíteros, laicos y religiosos para analizar la situación nacional.
De ella resalta la importancia porque en México exista una pastoral de los derechos humanos, cuando "en estos momentos la violación a los mismos, dentro y fuera de la Iglesia, se ha incrementado notablemente".
Para la CEPS, los grandes problemas "no van a ser resueltos sólo por un actor. Se necesita del concurso de diversos sectores y actores. La pastoral social tendrá que ser puente, crear los espacios necesarios, con los diversos ámbitos de gobierno, para articular acciones en favor de los excluidos". Lo anterior, subrayó, "en un marco de total y absoluto respeto al Estado laico, bajo acciones de cabildeo e incidencia que permitan influir en las políticas sociales y pública".
Manifiesta su preocupación por el "proyecto hegemónico que se expresa en América Latina con la creación del Area de Libre Comercio de las Américas y el Plan Puebla-Panamá, que buscan instaurar el dominio económico, geopolítico y cultural; la expansión del poderío de las grandes empresas trasnacionales, que no pagan impuestos, omiten los derechos laborales de los trabajadores, no garantizan plenamente la preservación del ambiente y violan sistemáticamente los derechos humanos".
Eso, subraya, "no permite el desarrollo integral de los humanos, vulnera sus derechos, desconoce su dignidad de hijos de Dios y los valores que como cristianos queremos encarnar -solidaridad, justicia, verdad, paz- no encuentran en esta realidad espacios de concreción".
Lamenta que el empobrecimiento arroje cifras de "no satisfacción de los requerimientos mínimos de alimentación, salud, educación y vivienda". A eso, especifica, responde la necesidad de construir un nuevo pacto o alianza social porque "vivimos un momento de transición marcado por las tendencias de la globalización y hasta ahora no hay resultados sobre una necesaria reforma del Estado".
La CEPS reclama "exigir respuestas acordes con los valores de la buena noticia del reinado de Dios". Entre ellos, generar procesos de formación que permitan a los cristianos una mejor incidencia en la transformación de la sociedad y contar, a la vez, con "sujetos organizados, activos, solidarios, críticos y responsables ante su realidad".
