Aplaza la ANP una reunión para analizar
el plan de retiro de los territorios reocupados
Dos incursiones israelíes en Gaza provocan cinco
muertos, cuatro de una misma familia
Pierde la economía palestina 7.6 mdd diarios
por las restricciones de Tel Aviv: Naciones Unidas
AFP, DPA Y REUTERS
Ciudad de Gaza, 29 de agosto. Cinco palestinos,
cuatro de una misma familia, murieron este jueves en dos incursiones del
ejército israelí en Gaza, mientras que la guerrilla chiíta
libanesa Hezbollah reanudó su lucha en el sector disputado de Chebaa,
hiriendo a tres soldados israelíes.
Los palestinos aplazaron una reunión de seguridad
con Israel para examinar el plan de retirada paulatina de las zonas reocupadas
después de la muerte de cuatro palestinos en Gaza, que los grupos
integristas Hamas y Jihad islámica juraron vengar.
Una palestina de 55 años, dos de sus hijos y uno
de sus sobrinos murieron por disparos de obuses de tanques israelíes
que la madrugada de este jueves destruyeron su casa durante una incursión
en esa localidad. Otros cinco hijos de esa mujer resultaron heridos.
Un niño palestino murió y 12 personas más
resultaron heridas durante una incursión israelí en Rafah,
sur de la franja de Gaza. Con estas muertes, el número de decesos
desde el inicio de la intifada en septiembre de 2000 se eleva a
2 mil 463, entre ellos mil 818 palestinos y 602 israelíes.
El
presidente palestino, Yasser Arafat, calificó de "crimen" el ataque
en el que murieron cuatro miembros de una misma familia y su principal
asesor, Nabil Abu Rudeina, estimaba que se trató de una matanza
destinada a sabotear el plan de retirada del ejército israelí.
La Autoridad Nacional Palestina (ANP) pidió al
gobierno israelí que arreste a los soldados responsables y los juzgue
lo antes posible.
El ministro israelí de Defensa, Benjamin Ben Eliezer,
lamentó el drama y ordenó al ejército un informe para
aclarar lo ocurrido. También reiteró su intención
de seguir aplicando su plan de retirada durante una reunión que
mantuvo con el responsable adjunto para Oriente Medio del Departamento
de Estado estadunidense, David Satterfield.
"Los miembros de una familia fueron asesinados a sangre
fría", dijo a Reuters el dirigente de Hamas, Mahmoud Al Zahar, mientras
observaba los cuerpos de las víctimas en una morgue de Gaza. A su
vez, Jihad islámica emitió un comunicado en que prometió
vengar la muerte de la familia.
Testigos aseguraron que el ataque en que murieron Ruwaida
Al Hajeen, de 55 años, sus hijos Ashraf y Nidah, de 23 y 17 años
respectivamente, y un primo, Moha-mmed, de 20 años, comenzó
cuando tanques israelíes se desplazaron hacia esa zona de Gaza,
en la madrugada, disparando morteros.
Horas más tarde fuentes médicas palestinas
dijeron que un niño palestino de 12 años murió al
ser baleado por tropas israelíes que vigilaban un puesto del ejército
en la frontera de Gaza con Egipto.
El Alto Comité de las Fuerzas Nacionales e Islámicas,
que reagrupa a los 13 principales grupos palestinos, instó a la
ANP a suspender sus contactos con el gobierno israelí.
Por su parte, la ONU alertó en un informe que el
índice de desempleo en los territorios se aproxima a 63 por ciento,
y precisó que la economía palestina perdía 7.6 millones
de dólares diarios debido a las restricciones israelíes.
Asimismo, el enviado especial de la ONU para Medio Oriente, Terje Roed-Larsen,
reiteró que el continuo sitio y ocupación de los territorios
autónomos palestinos ha llevado a la población palestina
al borde de la catástrofe humanitaria, donde, según un informe
de la organización, 70 por ciento de la población está
en la pobreza.
En la frontera israelí-libanesa, después
de cuatro meses de calma, disparos del Hezbollah chiíta libanés
contra posiciones israelíes en el sector disputado de las granjas
de Chebaa (en los confines de Israel, Siria y Líbano) hirieron a
tres soldados israelíes, uno de gravedad.
En respuesta, dos cazabombarderos israelíes dispararon
dos misiles aire-tierra sobre una zona aledaña a la localidad de
Kfarchuba, mientras militares disparaban con artillería pesada.