Según cifras oficiales, 19 de los 35 millones de habitantes viven en la pobreza
Ratifica el gobierno argentino que las elecciones serán en marzo; tensión en el Partido Justicialista
Hasta el momento las encuestas marcan como amplio favorito al abstencionismo
STELLA CALLONI CORRESPONSAL
Buenos Aires, 22 de agosto. En medio de un proceso electoral enturbiado por una feroz competencia interna en el Partido Justicialista (PJ-peronista), el gobierno argentino ratificó el calendario para las elecciones de marzo próximo, entre críticas de la Iglesia católica y una amenaza de renuncia por parte del presidente Eduardo Duhalde.
El clima de tensión ha venido creciendo en los últimos días, con las embestidas del ex presidente Carlos Menem al interior del justicialismo. Y el martes, la diputada Elisa Carrió, dirigente de Alternativa para una República de Iguales (ARI) y candidata presidencial, decidió suspender su campaña electoral para "impulsar cambios en la convocatoria a elecciones" y "privilegiar un espacio de unidad popular".
Además, reclamó, junto al candidato de Autodeterminación y Libertad, Luis Zamora, la convocatoria a una Constituyente antes de finalizar el año. Carrió y Zamora, junto a Víctor de Gennaro, dirigente de la Central de Trabajadores Argentinos (CTA), abrieron un espacio para trabajar en conjunto, a fin de impulsar una renovación de todos los cargos electivos.
De Gennaro, por su lado, acusó este jueves a Duhalde de armar "un festival de fechas electorales", en momentos en que el país atraviesa la peor crisis económica y social de su historia, con casi 19 millones de sus 35 millones de habitantes en la pobreza, según cifras oficiales reveladas ayer.
También hubo críticas desde la Conferencia Episcopal Argentina, que en un comunicado manifestó su preocupación por la "frivolidad" con la que los candidatos presidenciales manejan su campaña, con enfrentamientos sobre el reglamento.
Los seguidores de Menem afirmaron esta semana que Duhalde "quiere quedarse" en el gobierno, en momentos en que el ex mandatario es superado ampliamente por otros candidatos de su partido, como el ex gobernador y ex presidente interino Adolfo Rodríguez Saá, que ahora superó a Carrió y encabeza las preferencias a nivel nacional, con 14.3 por ciento de las intenciones de voto.
Los menemistas amenazan también con recurrir a la Corte Suprema de Justicia -acusada precisamente de su dependencia del ex mandatario peronista- para impugnar los decretos presidenciales que regulan la elección interna abierta del Justicialismo para el próximo 24 de noviembre. Incluso, amenazan con quebrar el bloque legislativo del PJ si no se frena el juicio político a la desprestigiada Corte, que demanda más de 80 por ciento de los argentinos.
Esta batalla, que deja al descubierto la atomización peronista, afecta todo el espectro electoral, en momentos en que la crisis sin precedente se refleja en otro dato divulgado la víspera: el número de indigentes se duplicó desde octubre pasado.
Minimizan amenaza de Duhalde
"De ninguna manera voy a postergar las elecciones internas (peronistas para elegir candidato)", declaró Duhalde este jueves. Mientras, el jefe de gabinete, Alfredo Atanasof, pidió que se termine la "telenovela" en torno a los decretos electorales y minimizó declaraciones de Duhalde hechas al diario Clarín, en las que amenazó con que si se ponen trabas a las elecciones internas peronistas, mejor que el Congreso "designe a otro para la transición".
Menem busca evitar los comicios internos abiertos a todos los ciudadanos, es decir, que todos puedan elegir a los aspirants de cada partido, debido al alto índice de rechazo entre los argentinos, que lo identifican como símbolo de corrupción.
Pero no sería sólo su impopularidad la que le cerraría el paso a un tercer mandato. Aunque los equipos en sombras de quien se declaró aliado "carnal" de Estados Unidos han logrado desplazar al fiscal Carlos Stornelli, quien llevaba adelante las investigaciones por la venta ilegal de armas a Ecuador y Croacia (1995), y arrancaron la causa de manos del juez Jorge Urso, dejándola en manos de otro pro menemista, la situación judicial es complicada.
El ex presidente maniobra para demorar las indagatorias sobre las cuentas en Suiza, pero ayer se confirmó que deberá explicar por qué omitió declarar una cuenta bancaria en ese país. Otro traspié vino de la mano de su esposa chilena, Cecilia Bolocco, quien dijo recientemente que The New York Times le había enviado una carta de disculpas a su marido por la información de que éste había recibido 10 millones de dólares de Irán, pero el propio periódico desmintió la existencia de tal misiva.
Entre todos estos enfrentamientos peronistas, Zamora dijo hoy que tanto Menem como Duhalde son "mafiosos", y que si la clase política local "no da un paso al costado", cuando se celebren las elecciones, habrá millón y medio más de pobres. Mientras, las encuestas muestran que para marzo el gran favorito es el rechazo a votar.