La porra Rebel fue expulsada del estadio por "falta de seguridad"
Protesta UNAM por las agresiones del sábado
La directiva de Pumas de la UNAM anunció ayer que presentó una enérgica protesta ante la Federación Mexicana de Futbol, debido a los hechos de violencia que sufrieron el sábado anterior, luego de su enfrentamiento con la Pandilla del Monterrey, dentro de la jornada tres del futbol mexicano.
El vocero del club universitario, Víctor Manuel Juárez, informó que no hubo daños humanos que lamentar, dado que tanto jugadores como cuerpo técnico se protegieron tirándose al piso del camión que los transportaba, cuando lo estaban apedreando.
Juárez aseguró que al salir del estadio "fuimos emboscados en una calle en la que necesariamente se tiene que bajar la velocidad, porque hay una curva". Agregó que de pronto se vieron en medio de "una lluvia de pedradas y todos los integrantes del equipo, incluyendo al técnico Hugo Sánchez, el cuerpo médico y los utileros, debieron tirarse pecho tierra para cuidar la integridad física".
En su relato señala que el chofer del autobús logró reaccionar "y aceleró para sacar" la unidad del lugar.
Además del susto, el club del Pedregal deberá responder por los daños que sufrió el autobús, porque Juárez aseguró que el seguro no cubre "los actos vandálicos" sobre la unidad.
El vocero del equipo lamentó que la directiva del Monterrey no les haya proporcionado la seguridad necesaria, después de que al finalizar el partido un grupo de aficionados rompió el parabrisas del camión y ningún policía o personal de seguridad los escoltó para abandonar el estadio Tecnológico, escenario de su duelo ante la Pandilla del Monterrey.
El club universitario también reprobó la actitud que asumió la policía al sacar a los integrantes de la porra denominada Rebel del estadio, argumentando que no les podía garantizar su seguridad.
Explicaron: "se dijo que los habían sacado porque se les decomisaron cohetones y petardos, pero cuando se encuentran cosas así, se procede a la consignación de las personas que los llevan y no hubo ningún consignado en la porra". Indicaron que los sacaron del estadio a empujones, señalándoles que no podían garantizarles su seguridad, "pero ya les habían cobrado su boleto".