El presidente Cardoso se reunió con los cuatro candidatos presidenciales
Advierte Lula da Silva que, de ganar, cambiará
la política económica brasileña "desde el primer día"
PL, AFP, REUTERS Y DPA
Brasilia, 19 de agosto. El presidente de Brasil,
Fernando Henrique Cardoso, discutió este lunes por separado con
los cuatro candidatos a sucederlo en el poder la grave crisis que afecta
al país y las medidas de confianza para inversionistas y acreedores.
El
mandatario presentó cifras y argumentos que, en opinión de
su equipo económico, justificaron la necesidad de negociar un convenio
con el Fondo Monetario Internacional (FMI) que prevé un préstamo
de 30 mil millones de dólares, de ellos seis mil millones serán
desembolsados antes del 31 de diciembre, cuando finaliza el mandato de
Cardoso, y se compromete por lo menos el primer año de gobierno
de la futura administración.
Luiz Inacio Lula da Silva, candidato del izquierdista
Partido de los Trabajadores fue el primero en entrevistarse con Cardoso,
a quien aseguró que si su partido gana las elecciones comenzará
"a cambiar la política económica desde el primer día".
Aseguró que es "prioritario" impedir que las reservas internacionales
del país sean consumidas, "en la medida en que el nuevo acuerdo
con el FMI no prevé a corto plazo aportes financieros significativos".
Lula, favorito en las encuestas, entregó una carta a Cardoso en
la cual propuso algunas ideas para superar la crisis.
El ex gobernador Anthony Garontinho, candidato presidencial
del Partido Socialista Brasileño (PSB), rechazó cualquier
compromiso con el FMI tras reunirse con Cardoso. "El PSB y su candidato
no tienen ningún compromiso con esa política. Nosotros la
combatimos", declaró en una nota que entregó a la prensa
al término del encuentro.
Garontinho propuso que ante su magnitud, el acuerdo con
el FMI "debió haber sido sometido al Congreso Nacional y discutido
ampliamente con la sociedad antes de ser firmado", y advirtió que
el país corre el riesgo de volver a ser una colonia.
Por su parte, el centroizquierdista Ciro Gomes, candidato
del Frente Laborista, se reservó su juicio sobre el programa acordado
con el FMI, aunque dijo estar comprometido con la estabilidad económica
del país, tras reunirse con Cardoso.
Gomes, segundo en las encuestas a siete semanas de los
comicios de octubre, explicó que en caso de resultar electo, respetaría
las metas fiscales para 2003 que el FMI incluyó en el acuerdo y
prometió "estricto cumplimiento y respeto por los contratos y un
compromiso definitivo con la estabilidad de la moneda".
Mientras, Jose Serra, candidato oficialista del Partido
Social Demócrata, calificó el acuerdo con el FMI de "bastante
positivo" y dijo que éste creará empleos y fomentará
el crecimiento.