lunes 19 de agosto de
2002 |
n Durante dos meses 470 personas aprendieron a leer y escribir; la mayor de ellas, de 94 años |
Concluyó en 14 comunidades de la Sierra Norte la segunda campaña de alfabetización de la UAP |
Jorge Machuca Luna n |
Este fin de semana culminó la segunda campaña de alfabetización que llevaron a cabo preparatorianos de la Universidad Autónoma de Puebla (UAP) en 14 comunidades marginadas de cinco municipios serranos, en la que 470 personas aprendieron a leer y a escribir, tomaron clases de operaciones matemáticas, primaria y secundaria. |
Durante dos meses, los 70
estudiantes involucrados en la labor de enseñanza en
algunas de las partes más subdesarrolladas de la entidad
dedicaron su periodo vacacional a alfabetizar sin recibir
dinero ni beneficio académico alguno, según aclaró
Jorge Pedrajo, uno de los organizadores de la campaña,
quien refirió que la participación de cada uno de los
involucrados fue voluntaria. "Aquí no se viene a ayudar ni a hacer labor social; es algo que nos toca, que nos corresponde como estudiantes", consideró Adrián Teutle, alumno de la preparatoria Simón Bolivar de Atlixco, que atendió a un alumno de 94 años; a los labriegos analfabetas "no venimos a darles limosna ni caridad, sino lo que les corresponde por derecho", aseguró. Aunada a la labor de enseñanza, brigadas de estudiantes de medicina visitaron las comunidades para dar asistencia sanitaria a las poblaciones más lejanas de algunos centros de salud. También acudieron a la zona dentistas y biólogos de la UAP. Pese a que su labor fue desarrollada entre el 17 de junio y el 16 de agosto, la preparación de los alfabetizadores comenzó desde diciembre hasta poco antes de su arribo a la Sierra Norte, lapso en el que se les capacitó bajo el "método de palabra generadora", creación del pedagogo brasileño Paulo Freire, a través del cual se logra que los adultos sepan leer y escribir en 45 días. Tal método logró ser aplicado con éxito en 14 poblaciones de los municipios de Jonotla, Tuzamapan de Galeana, Zoquiapan, Tenampulco y Ayotoxco de Guerrero; durante su estancia en las comunidades, diariamente los alfabetizadores, además de desarrollar su labor de enseñanza, también se encargaron de capacitar a otros estudiantes de bachillerato de la zona para que éstos continúen con la labor de enseñar a leer y escribir a más personas. Enfrentando temperaturas de casi 40 grados centígrados, la falta de energía eléctrica y de caminos, así como -en contados casos- el rechazo inicial de algunos alfabetizandos, los maestros de la UAP, además de desarrollar su encomienda, también aprendieron a cortar pimienta, "echar tortillas", chapear -escombrar- la tierra e incluso a hablar un poco de náhuatl. Durante el acto de clausura de la campaña alfabetizadora, que se realizó el sábado al mediodía en San Antonio Rayón, junta auxiliar de Jonotla -y centro de operaciones de los preparatorianos de la Universidad Autónoma de Puebla-, se confirmó que en la labor educativa de este año participaron poco más de 140 miembros de la máxima casa de estudios. Como parte de la ceremonia, que a decir de los propios alfabetizandos fue uno de los actos más emotivos de su vida, Paula González, alumna de la preparatoria Emiliano Zapata, dijo que por este año, siguió su recorrido "un tren llamado alfabetización, cargado de letras y movido por la esperanza y la voluntad de construir un país mejor". "Nos llama la atención", continuó, "lo contradictorio de lo que hemos aprendido en este recorrido; comunidades hermosas y una pobreza lacerante, comunidades llenas de aprendizaje que no figuran siquiera en los mapas oficiales". |