Rector de la basílica
Con el Evangelio, hay que dar fin a las "porquerías"
ALMA E. MUÑOZ
El rector de la Basílica de Guadalupe, Diego Monroy, se pronunció porque dentro de los ámbitos político, económico, social y cultural de México influya la evangelización para dar fin a aquellas "porquerías" que denigran al ser humano y lo conducen a la "cultura de la muerte".
Al oficiar la misa por la celebración del primer Hallel Guadalupano -acto realizado con jóvenes, aunque en esta ocasión no tuvo éxito, porque sólo unos cuantos se hicieron presentes en el atrio de la basílica, tanto que de decenas de sillas ubicadas en el lugar, sólo las dos primeras hileras se llenaron-, el prelado insistió en que la conducción de las acciones en México debe darse a partir de lineamientos religiosos.
"Nuestra devoción, nuestro amor a Santa María de Guadalupe debe ser un elemento dinamizador de nuestra fe. Esa fe se tiene que encarnar e incidir en lo social, en lo político, en lo económico y en lo cultural. Ella nos ayuda a comprender el Evangelio y nos conduce a su hijo, Jesucristo, y de esa manera cumple con nosotros la misión que tiene en la Iglesia."
Con la Virgen, insistió, "sigamos contrarrestando esa cultura de la muerte que es la violencia, la droga, el alcohol, el desenfreno, estas porquerías que vivimos hoy".