Arturo Requesens abandonó el país ante el hostigamiento
Pide CIDH información sobre defensor de derechos humanos amenazado de muerte
CLAUDIA HERRERA BELTRAN
La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) solicitó información al gobierno mexicano sobre la situación del defensor de derechos humanos Arturo Requesens, quien se encuentra fuera del país ya que ha recibido amenazas de muerte.
El director del Centro por la Justicia y el Derecho Internacional (Cejil), Juan Carlos Gutiérrez, indicó que en función del informe que entregue la cancillería mexicana, la CIDH solicitará al gobierno la aplicación de medidas cautelares para proteger la vida de Requesens, integrante de Acción de los Cristianos para la Abolición de la Tortura (ACAT).
Señaló en entrevista que el defensor de derechos humanos salió temporalmente del país luego de que ha sido víctima de hostigamiento por las labores de seguimiento que ha hecho de casos de tortura, desaparición forzada y ejecución extrajudicial.
De acuerdo con información de ACAT, la mañana del 17 de julio pasado, cerca de las 10:15, el sistema de buzón del teléfono celular de Requesens le indicó que tenía un mensaje guardado, en el cual se escucha primero un ruido que va de menos a más en su intensidad y al final el accionar de una arma cortando cartucho.
Requesens en ese momento se encontraba trabajando con la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal en el caso de Jesús Angel Gutiérrez Olvera, quien fue detenido y posteriormente desaparecido por policías judiciales el 14 de marzo de este año.
A partir de ello, la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal emitió una recomendación a la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal para que se investigaran debidamente los hechos y se garantizara que el Ministerio Público tomara todas las declaraciones de los testigos.
A raíz de investigaciones y testimonios de los familiares se realizó una diligencia en las oficinas de las Agencia Federal de Investigación (AFI) donde presuntamente había sido trasladado Jesús Angel.
En dicha diligencia se inspeccionaron todos y cada uno de los pisos del edificio de la AFI, incluyendo el sótano, sin encontrar a Jesús Angel, pero tras la visita comenzó el hostigamiento contra Requesens.