El resto evade representar a México:
Llamas
Sólo seis seleccionados de basquetbol entrenaron
Conade debe intervenir, pide Arturo Guerrero
ROSALIA
A. VILLANUEVA
Solamente seis jugadores de la selección mexicana
varonil de basquetbol acudieron al primer entrenamiento de cara al partido
amistoso que sostendrán este sábado con su similar de Argentina,
en el Palacio de los Deportes.
"La única razón por la que no vinieron los
demás es porque no quieren representar a México. Eso es egoísmo'',
expresó molesto Horacio Llamas, uno de los seleccionados presentes
ayer al gimnasio del Deportivo Chapultepec para recibir las indicaciones
del entrenador nacional Arturo Guerrero, quien tampoco ocultó su
enfado de que de 15 convocados sólo llegaron seis. Eduardo Nájera,
quien venía de su natal Chihuahua, era esperado anoche.
A la espera de enrolarse nuevamente en la NBA o emigrar
a Europa tras recibir ofertas de los equipos de Alemania, Italia y España,
Llamas consideró una falta de respeto que sus compañeros
no se presentaran a la concentración, pues a todos "nos dieron la
oportunidad, y si no están es porque temen quedar fuera de la selección.
"Si no pueden venir que avisen con tiempo para invitar
a otra gente que tiene ganas y coraje para conformar el mejor equipo que
puede tener México'', dijo el sinaloense.
El ex jugador de los Soles de Phoenix argumentó
que no tiene ningún caso "que nos estemos matando seis jugadores''
cuando deberían ser 15 para los tres encuentros que tendrán
contra Argentina (uno en la capital y dos más en provincia).
Si los dueños de los equipos donde juegan sus compañeros
no los dejan venir, "que no sea pretexto y mejor que lo digan'', porque
el compromiso ante los argentinos no será nada fácil, ya
que cerrarán su preparación aquí con miras al Mundial
de Indianápolis.
El Manosanta Guerrero abriga esperanzas de que
los jugadores se incorporen este martes, pues de mantener su postura negativa
"es momento de que la Conade, Codeme, federación y comisión
de selecciones nacionales tomen cartas en el asunto'', cuando todavía
hay tiempo para integrar un equipo para los Centroamericanos.