"No hubo equivocación" en elección de autores, replica la SEP a críticas

CLAUDIA HERRERA BELTRAN

Ante las críticas de escritores por la exclusión de autores de la lista de libros para las bibliotecas de aula de enseñanza básica, la Secretaría de Educación Pública (SEP) respondió que "no hubo equivocaciones". Aclaró que si se quedaron fuera algunos textos de autores clásicos fue porque podían resultar "inadecuados" para las competencias lectoras de los niños.

El subsecretario de Educación Básica y Normal, Lorenzo Gómez Morín, dijo que respeta las opiniones de escritores como Carlos Fuentes, Elena Poniatowska y Carlos Monsiváis, pero insistió en que el equipo que estuvo a cargo de la elección de los títulos está "respaldado completamente por la secretaría".

Señaló que los criterios que siguieron para la elección de los títulos, de los cuales se adquirirán 25 millones de libros por un costo de 450 millones de pesos, se sustentaron en el objetivo de que los estudiantes de prescolar, primaria y secundaria contaran con acervos "flexibles, heterogéneos, ilustrativos, lúdicos, recreativos y que no fueran exhaustivos".

Entrevistado sobre la polémica que desató la selección de libros que serán distribuidos en los 781 mil salones de las escuelas públicas del país, Gómez Morín manifestó su sorpresa por estas reacciones, pues consideró que "este es el esfuerzo más importante que en materia de lectura se ha hecho desde José Vasconcelos".

Más que preocuparle las críticas de los escritores, afirmó que le da gusto que por primera este tipo de asuntos se debatan públicamente como parte de un proceso que impulsó la dependencia y que calificó de abierto y transparente.

"Respeto" a opiniones contrarias

Sobre la opinión de Carlos Fuentes, quien consideró "crimen de lesa humanidad" la omisión de varios clásicos para las bibliotecas escolares, el subsecretario aseguró que la SEP respeta "profundamente" las opiniones del literato y explicó que seguramente el equipo que seleccionará los libros del próximo año y los de las bibliotecas escolares tomará en cuenta esas consideraciones.

En referencia a los señalamiento de la escritora Elena Poniatowska de que la selección se hizo "al vapor", dijo que no ocurrió así porque el proceso duró dos meses y fue producto del trabajo de 83 especialistas en el tema de la lectura.

La respuesta para Carlos Monsiváis -quien señaló que la imagen de alumno que diseñaron en la SEP es la de un estudiante que se propone no tener imaginación- fue que la secretaría se plantea todo lo contrario, porque en la selección se buscó hacer un balance entre los diferentes géneros literarios y categorías de libros para atender diferentes gustos, propósitos y niveles de lectura.

Frente a las críticas que provocó la exclusión de escritores como el premio Nobel Octavio Paz, Gómez Morín defendió al equipo responsable de la selección de los textos.

Explicó que se integró un grupo de 83 especialistas entre los que se encuentran maestros "que están trabajando con niños y niñas mexicanos", así como responsables de la promoción de la lectura, investigadores, científicos, escritores, pedagogos y representantes tanto de la SEP como de las entidades federativas. Aclaró que estos últimos "fueron los menos".

Al preguntarle si este grupo de especialistas se equivocó, expuso: "no veo por qué. Tomaron una decisión difícil, porque había muchos autores, todos del mismo nivel, pero a final de cuentas se tomó la decisión de una primera selección que no excluye a los más importantes autores contemporáneos en términos de narrativa infantil, de literatura, de teatro, de poesía, de cuento que hay en México y en Iberoamérica".

Indicó que no se incluyeron libros de Octavio Paz como El laberinto de la soledad porque "pueden tener un nivel que los niños de primaria y secundaria, en términos de competencia lectora, todavía no alcanzan a aprovechar en toda su dimensión".

De la exclusión de autores como García Márquez, Kafka, Alejandro Dumas, refirió que cada grado escolar tiene un objetivo de desarrollo de competencias lectoras y, por lo tanto, los textos deben corresponder con esos objetivos.

Por eso, explicó, se eligieron libros que abarcan todo tipo de materias: "ciencias naturales, ciencias exactas, indagación científica, que tocan tópicos sobre la Tierra, los animales, las plantas, pero también que tienen que ver con narrativa juvenil, infantil, con teatro, poesía, cuento, novela".

Sobre el tema, la SEP emitió anoche un comunicado en el que informó que este año será la primera vez que se instalen las bibliotecas de aula, adicionalmente a las llamadas bibliotecas escolares. Como parte de este programa se repartirán 25 millones de libros que corresponden a 292 títulos (29 por grado escolar), los cuales tendrán un costo de 450 millones de pesos.