Abrirán exposición en el Museo Casa Estudio del pintor y
Frida Kahlo
Se exhibirán imágenes inéditas
de los judas de Diego Rivera
Por vez primera ese recinto mostrará 45 figuras de cartonería
coleccionadas por el muralista
Contagió la revalorización del arte popular en los artistas
de su época, cuando era mal visto
MERRY MAC MASTERS
El pintor Diego Rivera fue un gran coleccionista de arte
popular, en especial de los judas. A partir de los años treinta
y hasta el día de su muerte, Rivera llegó a reunir cerca
de 140 de estas figuras hechas de carrizo y cartón. Incluso contrató
a Carmen Caballero como su judera particular. Acumulados en su estudio,
los judas a su vez se convertían en sus compañeros de trabajo.
Aunque haya escogido la carrera de ingeniería y
arquitectura, Raúl Abarca se inscribió en la clase nocturna
de fotografía que impartía Manuel Alvarez Bravo en la Escuela
Nacional de Artes Plásticas, y durante 20 años mantuvo una
relación cercana con Lola Alvarez Bravo.
Abarca estudió arquitectura con Ruth, la hija de
Rivera, y por medio de ella entró a la casa del artista guanajuatense.
De Abarca es el primer testimonio visual de Rivera en el acto de comprar
los judas.
''Fanatismo'' del maestro
¡Arte
judas!, exposición que el 14 de agosto será inaugurada
a las 20 horas en el Museo Casa Estudio Diego Rivera y Frida Kahlo (Altavista
y Diego Rivera, San Angel Inn), exhibirá allí por vez primera
45 judas de la colección del muralista, no como escenografía
del recinto, sino como arte popular. También muestra 60 fotoimágenes
y seis fotografías vintage, todas inéditas, de Raúl
Abarca, en lo que es la primera exhibición de éste.
Sobre la pasión de Rivera por los judas, Magdalena
Zavala, titular del Museo Casa Estudio, señala que Carmen Caballero
se fue a vivir a la casa sanangelina, como también lo hizo
en una época la familia Linares. El gusto del maestro por la cartonería
también se extendió a las calacas y las llamadas muertecitas,
hechas por Caballero, algunas de las cuales tienen la cara de Cantinflas.
El ''fanatismo" de Diego Rivera, apunta Zavala, comenzó
por ''estos grandes ninotes que aparecían en las calles durante
Semana Santa y que pronto fue depurando", aunque a los juderos los dejaba
en ''plena libertad de creación".
Caballero, quien vivía en la tradicional calle
de los juderos, San Pedro y San Pablo, cuyos productos eran canalizados
al mercado Abelardo L. Rodríguez, alguna vez relató: ''Llegué
al Abelardo llevando hartos judas y de ahí tuve conciencia con el
patrón que me retrató con todo y mis judas. Entonces le entregué
un judas que mide 2.5 metros, hecho de 150 carrizos. Fue la primera entrega
que le hice con otras muertecitas también, y de ahí que me
dijera que si quería ser su judera particular y yo le dije que sí..."
Para Zavala, ''Diego contagió en gran medida esta
revalorización del arte popular en los artistas del momento". La
muestra también incluye un boceto de Jesús Reyes Ferreira
sobre un judas, así como un dibujo de José Chávez
Morado. Se exhibe el óleo El estudio del pintor (1954), de
Rivera. El único judas que no es del coleccionista es uno de Frida
Kahlo, reconocible por su corsé y cejas unidas, que el muralista
obsequió a Chucho Reyes.
Tiras de contacto
Andrés Siegal mandó fotocopias de las imágenes
de Raúl Abarca al Museo Casa Estudio cuando Blanca Garduño
aún era su directora. Al llegar Zavala y revisar los proyectos de
exposición, advirtió que había una propuesta al respecto.
Cuando Zavala vio las fotos de Abarca, ''le hablé a Andrés
para decirle que me ha-bían encantado y quisiera hablar con Raúl,
porque quiero hacer una exposición sobre los judas". Por azares
del destino Abarca, de 82 años, ya no conservaba los negativos,
pero tenía sus fotografías en tiras de contacto.
Las imágenes de Abarca testimonian una tradición
que se pierde, de cómo la obra era producida dentro de las casas
de los juderos, y la pobreza en la que éstos vi-vían. Luego
cómo llevaban a cuestas los judas al mercado Abelardo L. Rodríguez
para venderse de nuevo en los atrios de las iglesias y ser quemados. La
única quema de judas que retrató fue una organizada por los
comerciantes de la calle de Madero para promover sus locales.