Carmen Boullosa habla de su nuevo libro De un salto descabalga la reina
Trascender como animal sentimental sería ''la peor tumba de Cleopatra''
La escritora se opone a esa visión del personaje histórico contada por los romanos
Se trata de una novela ''sobre la fobia al afecto conyugal, en el que hay miedo y atracción''
ERICKA MONTAÑO GARFIAS
Cleopatra reina y mito. La emperatriz derrotada por el amor, dueña del mundo antiguo y en diálogo con los dioses. Tres partes de una sola persona para tratar de responder si el amor es necesario o si, como expresó Esquilo en una de sus obras, es preferible ''la muerte antes que el lecho de un hombre".
En su nueva novela De un salto descabalga la reina (Debate), Carmen Boullosa se adueña de Cleopatra, personaje histórico, para contestar preguntas contemporáneas: ''Ƒel mundo de pareja nos construye o nos destruye? ƑEs el lecho conyugal la muerte para el esposo y la esposa -como fue el caso de Marco Antonio y Cleopatra, dice la tradición popular, literaria, según Propercio, Virgilio o Shakespeare- o el lecho conyugal es un espacio en el que la esposa se construye, crece y florece?"
Mujer para actuar y gobernar
Cuando escribí la novela, señala Boullosa en entrevista, ''eran preguntas necesarias para mí, dolorosas, pero que necesitaba hacerme", aunque ese no fue el único motivo. También fue escrita como respuesta a sus libros anteriores sobre piratas Son vacas, somos puercos y El médico de piratas, que representaban ''una sociedad en la que las mujeres estaban prohibidas".
En De un salto descabalga la reina ''los hombres son echados de la comunidad. Es una novela fóbica: la fobia al amor conyugal pero, como en toda fobia, lo que hay es miedo y atracción. Viví la novela como una reflexión sobre el mundo conyugal".
Boullosa cuenta la historia de Cleopatra a través de la pluma de Diómedes, su escribano, quien traiciona a su reina ya muerta y accede a ratificar lo que los romanos quieren contar sobre la emperatriz para presentarla ante la historia como ''un animal sentimental".
En la primera parte cede a la tentación y da vida a una mujer derrotada por el amor, cargada de reproches, y ''usa el tono sentimental atribuido por los romanos. Esa fue la peor tumba para Cleopatra y es como quedó guardada generación tras generación: como animal sentimental. No pudo haber sido tal porque no habría sido reina de Egipto tantos años en una época tan difícil. No habría sido compañera de César. No habría llevado sus mejoras a Roma. Era mujer que gustaba de actuar, gobernar y no andar chilleteando como la pone Shakespeare en Marco Antonio y Cleopatra".
En la segunda parte Diómedes rectifica y habla de Cleopatra niña-adolescente que se sabe la única capaz de recuperar el trono de Egipto. De nueva cuenta Diómedes dice al lector que ésa no era Cleopatra y entonces decide quitarse de encima las mentiras, la versión de los romanos, para descubrir a una mujer que habla con los dioses y con personajes mitológicos: Neptuno, los centauros, las sirenas y, especialmente, las amazonas cuyo grito de guerra era ''la muerte antes que el lecho de un esposo".
En esta última parte Boullosa desnuda a Cleopatra. ''No era un striptease, era buscar la esencia de por qué ha sobrevivido tantos siglos y sigue siendo un personaje atractivo. En parte eso es porque la figura femenil que se da al gobierno se liga a los hombres: uno lo encumbra y otro la destruye. Sí vale en ella hacerse la pregunta de si sus hombres fueron la destrucción o la construcción. Además, preguntarnos sobre el amor sigue siendo algo vigente y sobre el mundo de pareja más todavía. Para una mujer joven la decisión de si quiere una pareja es más necesaria que hace 20 0 50 años: Ƒpara qué tener una pareja si eres una mujer profesional, si puedes con tu propia vida?"
Afinidad y repulsión
Por Cleopatra, agrega la escritora radicada en Nueva York, "siento afinidad y repulsión: la admiro como mujer de acción, pero no como personaje literario. No me gusta la Cleopatra de Shakesperare, me avergonzaría cualquier parecido con ella; chantajear a un hombre para que no regrese con la otra. Tengo por ella admiración y repulsión, cercanía y distancia".
Necesitó esa distancia, agrega, porque es una novela sentimental. ''Nunca había escrito una novela sentimental y De un salto... está cargada de problemas del corazón más que intelectuales. No imaginaba esta novela en mi mundo de escritora, fue un encontronazo y lo mismo me pasó con el personaje de Cleopatra".
En su novela hizo lo que se debe hacer cuando se escribe: ''Atreverse a recorrer caminos que nunca se han pisado, porque cada libro tiene que ser distinto al anterior. Enfrentarse al texto como si fuera un cuerpo vivo y el escritor es sólo un arqueólogo que le quita lo que va sobrando".
(De un salto descabalga la reina se presenta el jueves 8 a las 20 horas en el bar El Hábito, con la mesa redonda ''Cleopatra hoy". Participan Marta Lamas, Sandra Lorenzano, Rosario Robles, María Teresa Priego y la autora.)