Directora General: Carmen Lira Saade
México D.F. Martes 6 de agosto de 2002
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Bagdad debe aceptar sin condiciones la entrada de inspectores: Consejo de Seguridad

Nos tomaremos nuestro tiempo con Irak, "pero la historia nos llama a la acción", afirma Bush

Paralmento iraquí invita al Congreso de EU a verificar su arsenal; la oferta es rechazada

DPA, AFP Y REUTERS

Nueva York, 5 de agosto. El secretario general de la ONU, Kofi Annan, declaró que consideraría la invitación de Irak al jefe de los inspectores de armas del organismo, Hans Blix, para mantener conversaciones en Bagdad, pero el Consejo de Seguridad del organismo rechazó tal invitación.

Mientras, el presidente de Estados Unidos, George W. Bush, señaló que no actuará apresuradamente contra "los peores dirigentes del mundo", buscando tranquilizar a la clase política de su país y a sus aliados, preocupados por una intervención militar contra Irak sin previo apoyo local e internacional.

"Nos tomaremos nuestro tiempo para estar seguros de que nuestra política es la correcta. Pero la historia nos llama a la acción para defender la libertad", declaró Bush durante un acto republicano en Pittsburgh.

Por su lado, en una reunión con Annan, la mayoría de los 15 miembros del Consejo de Seguridad dejó en claro que Irak primero debe permitir sin condiciones la reanudación de las inspecciones de armas para que se dé inicio al diálogo.

Irak debe cumplir con las resoluciones del Consejo, indicó el embajador estadunidense ante la ONU, John Negroponte. En 1999 el Consejo de Seguridad pidió que los inspectores de armas -expulsados de Irak un año antes- pudieran regresar al país y disponer de 60 días para determinar qué preguntas quedaban pendientes de respuesta por parte del gobierno en Bagdad.

Annan señaló, tras el encuentro, que la invitación no fue rechazada por él, pero que los iraquíes deben comprender que el Consejo de Seguridad le dio a Blix, por medio de sus resoluciones, "determinadas instrucciones de cómo proceder". Si Bagdad acepta cooperar sobre esa base con Blix, la invitación podría ser evaluada bajo otra luz, agregó Annan.

Antes de la reunión, Annan declaró que "en vista de las circunstancias actuales y los sucesos en Medio Oriente, no sería prudente atacar militarmente a Irak".

La ONU impuso sanciones a Irak en 1990, tras la invasión de Kuwait. Un factor clave para levantar esas sanciones es que los inspectores de armas de la ONU certifiquen que el país no tiene almacenadas ni está fabricando armas de exterminio masivo.

Irak, en tanto, continuó con su ofensiva diplomática. El presidente del Parlamento invitó este lunes al Congreso de Estadosirak_usa_dem Unidos a enviar a Bagdad una misión de legisladores y expertos en armas para investigar las denuncias de que el país está desarrollando armas químicas, biológicas y nucleares.

En una carta al Congreso, el líder parlamentario Saadoun Hamadi señaló que la delegación recibiría "todas las facilidades necesarias para buscar e inspeccionar cualquier planta e instalación que supuestamente produce, o pretende producir armas químicas, biológicas o nucleares".

Sin embargo, el vocero del Consejo de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Sean McCormack, dijo que "no hay necesidad de sostener conversaciones. De lo que hay necesidad es de que el régimen de Bagdad cumpla con su compromiso de desarme", añadió.

El presidente de la Comisión de Asuntos Exteriores del Senado, el demócrata Joseph Biden, arrojó rápidamente agua fría a la oferta iraquí. "Irak debe poner fin a sus tácticas dilatorias". los inspectores de armas de la ONU, lo que se ha negado a McCormack reiteró la opinión del gobierno de Bush de que las inspecciones no son la meta final de la presión internacional sobre Irak, y que el objetivo, más bien, es la eliminación de la capacidad iraquí para desarrollar o adquirir armas de exterminio masivo.

En este contexto, el primer ministro británico, Tony Blair, recibió el lunes la advertencia de que debe contar con el Parlamento a la hora de tomar una decisión sobre si Gran Bretaña se uniría o no a un posible ataque militar contra Irak.

Una de las voces más críticas de Blair en su propio Partido Laborista es la del veterano legislador Tam Dalyell, quien dijo al premier que para los miembros del Parlamento la cuestión de Irak era "la decisión más importante de sus vidas políticas".

En una carta pública, Dalyell afirmó que Blair tiene la obligación moral de llamar al Parlamento desde sus vacaciones veraniegas y debatir el asunto con sus colegas políticos.

El ex jefe de Defensa británico Lord Bramall, por su parte, señaló a Blair que debe apresurarse a proceder con cautela. "No tiene uno licencia para atacar el país de alguien simplemente porque no le guste su líder. Hoy en día se supone que se necesita el respaldo de la ONU para hacer esto", indicó.

Entre tanto, aviones de combate de Estados Unidos atacaron este lunes puestos de defensa aérea en el sur iraquí en respuesta a intentos de derribarlos, informó una fuente militar estadunidense.

Se trató del ataque 25 este año por parte de aviones de Estados Unidos y Gran Bretaña que custodian las zonas de exclusión en el norte y el sur de Irak, impuestas de manera ilegal y sin el consentimiento de la ONU tras la guerra del golfo Pérsico en 1991.

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