Guerrero Mier
El Congreso decidirá si quita inmunidad a edil de Tlahualilo
SAUL MALDONADO Y JAVIER VALDEZ CARDENAS CORRESPONSALES
El gobernador de Durango, Angel Sergio Guerrero Mier, declaró no estar preocupado por la queja interpuesta por la alcaldesa de Tlahualilo, Francisca Niño de Rivera, quien lo acusó de violar sus derechos humanos durante el proceso de desafuero que se realiza en contra de la funcionaria.
"Ella tiene todo el derecho de presentar su queja, incluso en contra mía; no me preocupa y menos porque quien sigue el proceso es el Congreso del estado (...) son ellos los que convertidos en juez dirán si le quitan la inmunidad procesal", expresó.
Reunido varias veces en privado con la edil, Guerrero Mier le pidió que actuara con transparencia y presentara todas las pruebas necesarias para su defensa.
Según el gobernador, la misma Niño de Rivera le comentó que si ella era un estorbo a su gobierno, entonces renunciaba. El le contestó que nadie era estorbo y que se dedicara a obrar como el resto de los alcaldes: actuar y demostrar documentalmente y con he-chos su trabajo.
Por otro lado, la 57 Legislatura del Congreso de Sinaloa rechazó por unanimidad las cuentas públicas de los municipios de Sinaloa y El Rosario, correspondientes al segundo semestre de 2001, por detectar irregularidades en la administración de los recursos públicos.
El dictamen de la Comisión de Glosa argumenta que la Contaduría Mayor de Hacienda no "está en posibilidad de determinar la razonabilidad de las cifras que reflejan los estados financieros".
En el caso de El Rosario, el órgano fiscalizador del Congreso local argumenta que no recibió respuesta a los pliegos de observaciones y recomendaciones contenidas en los informes de auditoría efectuada a esta administración; en cuanto a la cuenta pública de Sinaloa, el Congreso no terminó la auditoría por no haber recibido las compulsas a proveedores que pudieran modificar las cifras de la cuenta pública.