Fue estrella, no diva hechiza como la Félix: Pérez Turrent
Hollywood buscó a Katy Jurado, no al revés, señala Alfredo Joscowics
ARTURO CRUZ BARCENAS
Un aplauso del público para la actuación de Katy Jurado en las películas Caridad (Jorge Fons, México, 1972) y El bruto (Luis Buñuel, 1952) fueron el emotivo detalle final del homenaje rendido a la actriz fallecida el pasado 4 de julio en Cuernavaca, Morelos. El tributo fue organizado por el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (CNCA), a través del Instituto Mexicano de Cinematografía (Imcine) y la Cineteca Nacional, en colaboración con la Academia Mexicana de Artes y Ciencias Cinematográficas.
En la sala Salvador Toscano de la Cineteca Nacional -donde se instalaron unas fotografías de Katy de algunas de sus películas-, el pasado martes, previamente se realizó una mesa redonda en la que el director del Imcine, Alfredo Joskowics, dijo que Jurado fue una de las grandes actrices de México y una de las principales exponentes de "nuestra cinematografía".
Ella, agregó, internacionalizó con su trabajo el nombre de México. "Por eso una forma de reconocer su labor es organizar un ciclo fílmico con algunas de las películas más destacadas de su trayectoria... ƑPero qué pasa con Katy, desde su aparición en la cinta No matarás, de Chano Urueta, de 1943, hasta una actuación especial en 1998?
"Los historiadores y sus amigos contestarían rápidamente. Su talento formará parte de su leyenda. Sus números: murió a los 78 años, de los cuales 59 dedicó a su carrera; realizó 68 filmes. Recibió más de 200 premios nacionales y extranjeros. Trabajó con los directores de la era dorada del cine mexicano, como Ismael Rodríguez, Raúl de Anda, Alejandro Galindo y Luis Buñuel."
Añadió que el paso por Estados Unidos le valió a Katy dos veces la postulación al Oscar. Su nombre fue colocado en una estrella del Paseo de la Fama, en Hollywood. Ganó tres Arieles. "Debo decir que cuando fue a Hollywood ya tenía 17 películas en México. A ella la buscaron, no fue a buscar trabajo a EU".
Tomó la palabra el crítico Tomás Pérez Turrent: "Su importancia radica en haber sido una mujer y una actriz de recia personalidad... Su éxito fue tal que quizá sólo sea superada por Ricardo Montalbán, en cuanto a número de películas... El filmólogo chicano David Maciel decía con un raro acierto que no había que comparar a Katy Jurado con María Félix; Katy era una estrella y Félix era una diva que se autofabricó y rara vez trabajó para la obra".
Amiga hasta la muerte
Joaquín Jurado, nieto de la homenajeada, resaltó el carácter de su abuela. "ƑQué puedo decir de mi abuelota? Pasé diez años con ella en cuestión de cine... quería a México, a su profesión y a su familia". Siguió Juan Imperio, secretario general de la Asociación Nacional de Actores (ANDA), quien reiteró lo dicho por él y su comité en la misa de la semana pasada en la Basílica de Guadalupe, en el sentido que su organización (ingresó a la ANDA el 27 de junio de 1947) hizo homenajes en vida a Katy. Imperio fue criticado por no haber asistido al funeral de Jurado, pero argumentó que estaba en Tijuana y que no le había sido posible estar en el último adiós.
Por último, habló el actor Pedro Armendáriz hijo, quien subrayó el nexo de amistad entre su padre y Jurado, quienes actuaron en varias cintas. "Durante la enfermedad de mi padre, Katy iba todos los días a visitarlo. La primera persona que llegó cuando falleció fue ella."
Siguieron las películas arriba citadas, que provocaron risas, pena ajena, rubores. Pero los asistentes comentaron que ese tipo de películas, como Fe, esperanza y caridad y El bruto, tienen que ver con nosotros.
Hoy sigue el ciclo desde las 19 horas, con Los albañiles (Jorge Fons, 1976); mañana se proyectará El evangelio de las maravillas (Arturo Ripstein, 1998), a la misma hora.