Foro de La Jornada y Casa Lamm
Estados Unidos, débil y en quiebra, afirman expertos
Hay que frenar el modelo depredador e inhumano, dicen
FABIOLA MARTINEZ
ƑQué es actualmente Estados Unidos: imperio omnipotente, potencia hegemónica o país en quiebra financiera? ƑCuál es el futuro de esta nación que mantiene el control de la producción mundial, pero al mismo tiempo navega con evidentes signos de debilidad?
Estas son algunas de las preguntas que resolvieron, desde su perspectiva, Guillermo Almeyra, Alfredo Jalife-Rahme y Andrés Barreda, tres especialistas en la materia, quienes participaron en el foro La transición democrática en México después del 2 de julio, organizado por La Jornada y Casa Lamm, con el tema "Estados Unidos en la perspectiva estratégica: fortalezas y debilidades".
El debate, moderado por Angel Guerra, no fue llano ni rápido. Por el contrario, cada uno detalló argumentos y explicó cifras, aunque al final -como expresó Barreda- "ante la pelea histórica con el capitalismo es necesario medir bien la fuerza del enemigo para saber qué es lo que nos corresponde hacer".
Al inicio del encuentro, el doctor Almeyra -profesor de la UNAM, UAM y analista de asuntos internacionales- dijo que Mao Tse Tung se equivocaba cuando decía que el imperialismo era un tigre de papel. Este, dijo, tiene colmillos atómicos y no se le puede juzgar por lo que dice sino por lo que es en realidad.
Estados Unidos, explicó, actúa con descaro, no porque sea omnipotente, sino porque está en una situación de debilidad. Es evidente que si la intervención y amenaza brutal de Estados Unidos no logra impedir un proceso -político o económico- eso indica una debilidad creciente, una pérdida de influencia. Es como el gato en Alicia en el país de las Maravillas... se desvanece.
Cierran las puertas en Latinoamérica
Las recientes intervenciones frustradas en Argentina, Bolivia, Perú o Brasil, evidencian un retroceso de Estados Unidos en la región latinoamericana.
Estados Unidos tiene una fuerza muy grande, pero no es omnipotente. Almeyra los describió así: "Estados Unidos tiene diarrea. La crisis de corporaciones es diarrea, y la credibilidad del sistema está en crisis. No es una manzana podrida (Enron o WorldCom) sino un cesto de manzanas que ya está totalmente podrido; las finanzas caen, los conflictos internos restan confianza y crece la inestabilidad".
Luego, preguntó al auditorio, ƑEstados Unidos tiene los elementos para hacer frente a la recesión o para enfrentar una crisis política interna? De inmediato, el analista respondió: "No. Es un país cada vez más débil, un gigante amenazado, un gigante de pies de barro compuesto por una oligarquía corrupta y decadente".
En suma, hay que contar con la crisis del enemigo, šno hay que darle el rango de omnipotencia, porque la fuerza militar no basta si no existe el consenso político y, salvo que el gobierno de ese país aplique una política de dictadura total, la política financiera imperialista está desfasada..." y es necesario escuchar los crujidos de una casa vieja que no anda muy bien".
Por su parte, Andrés Barreda, profesor-investigador de la Facultad de Economía de la UNAM, señaló que el tema de la decadencia estadunidense no es nuevo ni se limita a la "cascada de quiebras" de las principales compañías de esa nación.
Barreda señaló que a cada crisis del imperio, éste resurge con un "poderío descomunal", por lo que rechazó las "cuentas alegres" que hacen prever una "corta vida a la hegemonía de Estados Unidos".
Ese país, reconoció, está inmerso en las contradicciones del propio sistema; sin embargo "permanece más fuerte que el resto de las naciones, por lo que no caerá por más contradicciones que tenga".
El argumento del especialista en economía estadunidense giró en torno al nivel productivo de esa potencia y los elementos que le confieren control estratégico, particularmente en materia tecnológica, industrial, de comunicaciones y transportes, materias primas -agua, petróleo y biodiversidad- y dominio del espacio.
"Y bueno, perdónenme, pero no están tan débiles... Sí veo que están en problemas, con una grave crisis; sin embargo, no existe hasta el momento una fuerza opositora que aproveche esta crisis que no afecta su hegemonía", señaló.
El control de las fuerzas productivas y el monopolio estadunidense en innovación tecnológica, producción pesada, recursos petroleros e incluso hegemonía alimentaria (producen 50 por ciento de los cereales y las tres cuartas partes de los alimentos industrializados que se consumen en el mundo) fue el detonante de un intenso debate entre los expertos.
En su turno, el doctor Jalife-Rahme, especialista en geografía política, fuerzas internacionales y globalización, presentó 30 láminas, sustentadas en cifras oficiales de Estados Unidos, para refrendar su tesis, casi única, sin cortapisas: "Estados Unidos es un país quebrado".
Datos "duros", resultado de una "mafiocracia y estafadores globales" que señalan colapso de la cuenta corriente, desplome del ahorro, deuda total de hogares por un monto de 8 trillones de dólares, que equivale casi al 100 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) estadunidense.
Con base en datos de la Reserva Federal, prosiguió Jalife-Rahme, se registraba hasta el año 2001 una deuda de corporaciones de 16 trillones de dólares y del gobierno de 7.5 trillones. En suma, una deuda de 30 trillones de dólares, equivalente a la producción mundial. "šHay un colapso, un espejismo de papel en el que incluso el dólar empezó a caer... es el inicio del fin de Estados Unidos!", expresó.
Al término del debate, los tres panelistas alcanzaron una coincidencia; las acciones que debe tomar la sociedad civil ante esa "crisis de dominación".
Barreda resumió: No es la primera vez que estalla una burbuja financiera de Estados Unidos, aquel que tiene las riendas de la producción, que se expande, y deprime salarios y derechos, sino la forma en que debemos actuar ante la pelea histórica con el capitalismo.
"La situación actual y futuro de Estados Unidos es cuestión de enfoques, pero al final del camino tenemos la obligación de 'conectarnos' como sociedad civil para frenar ese modelo depredador e inhumano que es la globalización..." y, la sociedad, ya frenó a ese gigante", puntualizó Jalife