El dirigente panista criticó a quienes añoran el autoritarismo y el presidencialismo

México ya no es país de un hombre: Bravo Mena

La precipitación y la desesperación, los principales enemigos de la transición, afirma

GEORGINA SALDIERNA

El dirigente nacional del Partido Ación Nacional (PAN), Luis Felipe Bravo Mena, defendió ayer la actuación del presidente Vicente Fox frente a las críticas que lo ubican como un jefe del Ejecutivo sin rumbo, y dijo que en "México ya no existe el país de un solo hombre". La pluralidad y la integración de puntos de vista diversos, son los rasgos característicos de la nueva forma de gobierno, enfatizó.

Puntualizó que esta nueva situación es producto de la transición, proceso al que equiparó con un "mar tormentoso"; que consumió más de 20 décadas y gracias al cual se logró dar un marrazo final -el 2 de julio- al sistema del priato y se descabezó el presidencialismo.

Sin embargo, advirtió que la consolidación de la transición no es obra fácil ni pronta. Toda transición requiere de periodos de asentamiento y de siembra. "Los frutos del cambio se verán muy pronto, en la medida que todos cooperemos mediante el diálogo sincero, sin trampas, sin chantajes, sin aportar a la ruina del país para luego ofrecerse como falsos redentores".

Bravo Mena consideró que el principal enemigo de la transición es la precipitación y la desesperación de quienes empujamos la transformación democrática.

Ante más de 300 panistas que acudieron a la Reunión Nacional de Estructuras Estatales, indicó que son momentos en los que se necesita decisión, claridad, perseverancia y, sobre todo, no caer en la impaciencia. No debe caber la desesperación ni el desánimo, puntualizó.

En un largo discurso teórico, refirió que la transición plantea para el PAN el reto de seguir luchando en contra del autoritarismo que persiste en algunos estados, y al mismo tiempo actuar con la responsabilidad de ser el partido en el gobierno.

Otro desafío son los brotes regresivos de quienes quisieran que fracasara esta experiencia y le apuestan al desánimo, a la desesperanza y a la frustración de la sociedad, para que sobre esa base y ese caldo de cultivo, se reposicione un proyecto de restauración autoritaria bajo el falsísimo argumento de que lo peor era lo mejor.

Sin embargo, los mexicanos, dijo, no queremos regresar a los tiempos en los que un grupo imponía al resto de la sociedad su proyecto o su modelo de país. Por ello, convocó a todos los actores políticos a que la consolidación de este nuevo México sea obra de todos.

Engañan al pueblo los que en añoranza del autoritarismo reclaman el ejercicio del presidencialismo desbordado como fórmula mágica para resolver los complejos problemas del país. De esta manera, señaló que el cambio que hoy se registra se ve y se siente en una Presidencia que actúa democráticamente, sin las perversas herramientas de las llamadas facultades metaconstitucionales de antaño. "Vicente Fox es un presidente legítimo, democrático y republicano. Nada menos, pero nada más", enfatizó.

En el centro de convenciones del Hipódromo de las Américas, Bravo Mena resaltó que ahora el Congreso es un poder real y actuante, al igual que el Poder Judicial. Por eso quienes acostumbrados al verticalismo corporativista y a la disciplina coercitiva, apelan a la repetición de esos modos y de esos estilos, para, según ellos, darle un rumbo y una orientación al gobierno. En el fondo lo que están reclamando es una regresión política; desconocen el mandato popular del 2 de julio y promueven la restauración del viejo sistema que ya arruinó al país y lo dejó cargado de rezagos e injusticias.

Pidió a la militancia no dar un paso atrás para evitar que se restaure el viejo régimen. También los convocó a despejar toda confusión y a descubrir las intrigas enderezadas a sembrar desesperanza y frustración.

En la inauguración, el secretario de estudios del CEN del PAN, Germán Martínez Cázares, dio a conocer el programa de los foros temáticos que se efectuarán del 20 de julio al 17 de agosto, para redactar una nueva proyección de principios de doctrina, un nuevo programa político y la plataforma legislativa del PAN para el 2003.

Es necesario generar ideas para los nuevos retos del país. Acción Nacional, puntualizó, debe recuperar la capacidad de soñar sin riesgo de que nuevamente le llamen "ingenuo" o místico.

Mientras que el priísmo nacional se aferra como en Ciudad Juárez al chanchullo y a la treta para pretender seguir en el poder, y el PRD, ni siquiera encuentra gobierno de sí mismo, el PAN piensa, de cara al 2003, en nuevos retos y busca generar nuevas ideas para alcanzarlo, concluyó.