Lenta y sin eficacia, la política agropecuaria del gobierno foxista: Jesús Vizcarra
Exige el CNA cese de la presión de EU por agua
MATILDE PEREZ U. Y DAVID ZUÑIGA
Estados Unidos comete un error al continuar presionando a México por el pago de agua, dijo el presidente del Consejo Nacional Agropecuario (CNA), Jesús Vizcarra Calderón, y advirtió que a los pobres no se les puede exigir más de lo que pueden dar, porque podrían rebelarse. "Debe dejar de insistirse en el asunto".
Además, al gobierno estadunidense le costaría apenas 300 mil dólares indemnizar a los agricultores texanos que dejaron de sembrar, mientras que para México el costo es más elevado porque sus campesinos son de subsistencia.
Vizcarra Calderón insistió en su llamado a reflexionar al gobierno estadunidense: "Tiene que ver a México como aliado estratégico, pensar en economías complementarias y no en relegar a los productores agrícolas mexicanos porque, en el futuro, podría revertirse y ser peligroso".
Respecto a la política agropecuaria federal, comentó que a pesar de que tiene acciones positivas y una buena estrategia, "va lenta, le falta eficacia". En una reunión de despedida como responsable del CNA, Vizcarra expuso que el reto de quien lo sustituirá será atender los efectos de la apertura total de los productos del sector dentro del Tratado de Libre Comercio de América del Norte, a partir del próximo año, así como del incremento de los subsidios a los productores estadunidenses y frenar las importaciones masivas.
Por su parte, Armando Paredes Arroyo, directivo de Agroindustrias Apal, comentó que el trabajo que ha hecho el gobierno foxista para apoyar al sector agropecuario tiene "buenas intenciones", pero persisten dispersión y falta de coordinación entre los programas de apoyo de distintas dependencias; además, no existen programas diseñados de acuerdo con las necesidades de cada sector y región.
Expuso que la falta de resultados se debe en parte a que el gobierno carece de recursos suficientes para apoyar al agro porque la reforma fiscal aprobada a finales de 2001 no ha aumentado significativamente la recaudación. "El gobierno está maniatado, no tiene suficientes recursos para apoyar al sector primario", aseveró.
Otras demandas del organismo empresarial serán el cumplimiento de leyes y normas de comercio exterior, el rechazo a prácticas proteccionistas de los principales socios comerciales de México y la eventual aplicación de salvaguardas en sectores sensibles, una verdadera política integral para el campo que propicie la competitividad sostenida de las cadenas productivas, acceso al financiamiento en condiciones accesibles y más recursos para investigación y desarrollo.
Paredes consideró incongruente que se pretenda aumentar las tarifas que los productores agropecuarios pagan por la electricidad y el agua. Esta medida, advirtió, sería el tiro de gracia para las empresas mexicanas y las dejaría fuera de competencia frente a las estadunidenses, que han recibido un aumento a los subsidios. Según el empresario, las autoridades mexicanas imponen a los productores nacionales condiciones más estrictas que aquellas que se aplican en el extranjero.
Los empresarios del campo, reconoció, están preocupados por la apertura prácticamente total que se dará a partir del próximo año como parte del Tratado de Libre Comercio de América del Norte.