Los Tiburones Rojos igualaron sin goles en León
y ganaron 3-1 global
Veracruz será el equipo 20 en la Primera División
Los Panzas Verdes nunca lograron atacar con orden y
fueron anulados por los escualos
NOTIMEX
Leon, Gto., 1º. de junio. Los Tiburones Rojos
de Veracruz hicieron valer su triunfo en el juego de ida al empatar hoy
a 0-0 en el choque de vuelta, para ganar por marcador global de 3-1 y conseguir
el ascenso a la Primera División del futbol mexicano.
La
organización del León, que hace 12 años ascendió
de la entonces Segunda División, deberá jugará en
la Primera A, mientras que Veracruz cuenta en este momento con dos clubes
en el máximo circuito.
En este choque la directiva de León, al igual que
los 30 mil aficionados que acudieron al Nou Camp, no podía dar crédito
a lo que sus ojos veían, al constatar el descenso de su equipo,
que en la década de los 70, 80 y 90 escribió con letras de
oro su nombre.
En esos años una pléyade de jugadores dejaron
honda huella en el club, como son los argentinos Jorge Davino y Rafael
Albrecht; y los mexicanos Antonio Carbajal, Carlos Turrubiates, Héctor
Santoyo, el brasileño Milton Queiroz Tita, Manolo Guillén,
Chepe Chávez y hoy Misael Espinosa, entre otros.
Pero en el vital cotejo de hoy los integrantes del equipo
de León salieron con deseos y ánimos, pero sin lograr entrar
en ritmo en el juego, al no tener un planteamiento táctico adecuado,
debido a que el entrenador Rafael Chávez Carretero fue separado
de la escuadra en los días pasados.
La dirección técnica del León la
asumió de forma interina para este compromiso Héctor Chavicos
Enríquez, apoyado por Benedicto Bravo. Se realizaron para este cotejo
cuatro cambios en relación con el pasado choque, los cuales fueron
determinantes en el accionar de la poca efectividad ante el marco porteño.
El cuadro de los Tiburones Rojos de Veracruz, tras cuatro
años de estar en la división de ascenso, logró regresar
al máximo circuito y hacer historia. Los escualos se convirtieron
de esta forma en el equipo número 20 de la Primera Nacional.
El cuadro porteño logró hacer un buen encuentro
bajo la guía de su entrenador Juan Alvarado, pues neutralizó
la ofensiva local con base en un futbol de contragolpe y puso varias veces
en jaque a la zaga local, apoyados por unos 250 seguidores que se trasladaron
a esta ciudad.
Entre llantos y silbidos los aficionados locales despidieron
a los jugadores del León, que descendieron a la Primera División
A.
La otra cara de la moneda la experimentó Veracruz,
cuyos jugadores se fundieron en abrazos y estallaron en júbilo llenos
de felicidad por el ascenso.
El árbitro del partido fue Marco Antonio Rodríguez,
quien tuvo buen trabajo.