Los tres reconocieron que existen serias dudas sobre los beneficios obtenidos
del acuerdo
Profundizar la liberalización del comercio,
pactan ministros del TLCAN
Declinaron tratar ante la prensa controversias sobre azúcar, transportes
y telecomunicaciones
El representante de EU reconoció que su país no es tan abierto
como México en esta actividad
HUMBERTO ORTIZ MORENO ENVIADO
Puerto Vallarta, Jal., 28 de mayo. A pesar de que
los ministros de Comercio de México, Estados Unidos y Canadá
reconocieron aquí que existen ''serias dudas'' entre sus respectivas
sociedades en cuanto a los beneficios obtenidos por el Tratado de Libre
Comercio de América del Norte (TLCAN), decidieron olvidar momentáneamente
cualquier diferencia y acordaron profundizar la liberalización comercial
regional y multilateral, ''en especial'' la cooperación y el liderazgo
de los socios de ese acuerdo en todos los foros por venir, con esfuerzos
adicionales que permitan desarrollar todo el potencial de ''una economía
norteamericana más integrada y eficiente''.
Al presentar una evaluación de ocho años
de vigencia del TLCAN, dejaron de lado las controversias del azúcar,
transporte y telecomunicaciones, entre otras, y convinieron en ''sacar
a la luz'' los éxitos para ''diseminar la información y promover
la transparencia y una mejor apreciación del tratado''. La apertura,
afirmaron, ''contribuye a la democracia''.
Tras varias horas de conversaciones que no derivaron en
avances concretos sobre los temas de conflicto -azúcar y transporte-
y solamente reafirmaron las líneas generales del TLCAN, los funcionarios
ofrecieron una rueda de prensa conjunta dentro de la llamada Comisión
Administradora del Libre Comercio, y establecieron que el intercambio de
mercancías sin fronteras es el único camino para abatir la
pobreza en el mundo.
En este sentido, Luis Ernesto Derbez, secretario de Economía,
desmarcó a la administración Fox del fenómeno de pobreza
existente en México porque, aseguró, no es producto del tratado
sino de políticas equivocadas desarrolladas por administraciones
anteriores a lo largo de 70 años.
A su vez, Robert Zoellick, representante comercial de
Estados Unidos, exaltó el liderazgo mexicano en apertura comercial
e incluso admitió que su país ''no es tan abierto'' como
México en esta materia. Precisó que gracias al TLCAN entre
1993 y 2001 las exportaciones de los tres socios aumentaron 225 por ciento:
95 por ciento las de Canadá, al doble las de Estados Unidos y al
triple las mexicanas, mientras a nivel global apenas subieron 25 por ciento.
Derbez apuntó que la mitad de los empleos generados
en los últimos ocho años están relacionados con la
expansión comercial, si bien ''no se ha resuelto el problema de
la ocupación en México'', y el salario es 40 por ciento más
alto en el sector exportador si se compara con otras actividades económicas.
En otro orden, el representante comercial estadunidense
subrayó que ''los subsidios al agro en los países americanos
son tres veces más altos que los de Estados Unidos por unos 2 mil
millones de dólares'', y por ende demandó tratar el tema
en forma global.
Al respecto, Pierre Pettigrew, ministro de Comercio Internacional
de Canadá, coincidió con sus colegas, expresó que
los resultados del TLCAN ofrecen ''números reveladores'' de sus
beneficios, pero cuestionó -sin mencionar directamente las subvenciones
agrícolas de la administración Bush- la aplicación
de subsidios a las exportaciones, asunto que habrá de abordarse
durante la próxima Ronda de Doha, y enfatizó que ''tenemos
que luchar contra el proteccionismo donde surja''.
Derbez abrió la conferencia de prensa con un breve
balance de ocho años del TLCAN, suscrito por Zoellick y Pettigrew.
Lo denominó ''motor del crecimiento económico'' que ha contribuido
a elevar el nivel de vida de los ciudadanos de los tres países.
Además, añadió, ''provee una sólida base''
para el desarrollo futuro y ''se ha constituido en un invaluable ejemplo
de los beneficios de la liberalización comercial''.
Desde 1994, recordó, los intercambios trilaterales
se han más que duplicado, al superar los 622 mil millones de dólares,
más de mil 700 millones de dólares comerciados diariamente
a través de las fronteras, ''haciendo de la región de América
del Norte una de las más competitivas, prósperas y económicamente
integradas del mundo''.
Mencionó el comunicado conjunto que a partir de
2003 la gran mayoría de los aranceles entre los socios del tratado
serán eliminados y reafirmó el compromiso con el funcionamiento
total del TLCAN, conforme a los calendarios establecidos.
En lo que fue el único acuerdo concreto, los tres
funcionarios instruyeron a sus expertos para que revisaran la operación
del capítulo 11 del acuerdo comercial relativo a la seguridad jurídica
de las inversiones, a fin de ''sugerir recomendaciones''.
Para difundir los ''éxitos'' que, según
ellos, ha tenido el tratado, dieron a conocer la publicación de
un folleto trilateral sobre el octavo año de vigencia y que estará
disponible en las páginas de Internet de los respectivos ministerios.
Cuestionado sobre el conflicto de los endulzantes, Zoellick
advirtió durante la rueda de prensa que sigue un principio desde
hace mucho tiempo: ''negociar con mi contraparte, no con la prensa''. Gustoso,
se le sumó Derbez Bautista. Así, ambos prefirieron discutir
el tema por la tarde de este martes, en privado, sin que trascendiera información
a los medios de comunicación.
Para el secretario Derbez, México ha salido mucho
más beneficiado con los resultados del tratado trilateral que Estados
Unidos y Canadá, y ''sólo dos temas (azúcar y transporte)
ni siquiera impiden el comercio''.
A su vez, Zoellick anotó: ''Tenemos diferencias,
pero yo creo que las estoy tratando con un ministro mexicano que quiere
comercio libre y que se queja de varias cosas que Estados Unidos no hace
porque no somos tan abiertos como ellos, pero esa es la historia real del
TLC''.