Impugnan los cambios legislativos en torno a desempleo, educación y extranjería

Las reformas de Aznar disparan las protestas

Unas 15 mil personas se manifiestan en Barcelona; 5 mil bloquean una carretera en Jaén

ARMANDO G. TEJEDA CORRESPONSAL

Madrid, 26 de mayo. La reforma a la ley de protección del desempleo aprobada el pasado viernes por el presidente del gobierno español, José María Aznar, despertó entre los agricultores un rechazo unánime, no sólo porque recorta sensiblemente las subvenciones y prestaciones sociales, sino también por la manera en que se impuso, mediante el llamado "decretazo gubernamental", a pesar de la previa convocatoria a huelga general para el 20 de junio.

Por su lado, unos 15 mil estudiantes, profesores y padres de familia salieron hoy a las calles de Barcelona para expresar su repulsa a otra reforma, la educativa. Reclamaron "una educación para todos", ya que a su entender la nueva normativa es "regresiva, clasista y elitista" y sitúa al sector en los mismos términos que primaban en los años 70, cuando todavía regía la dictadura de Francisco Franco. Advirtieron que de no modificarse la ley, vía consenso, en octubre habrá un paro general en la educación.

Las medidas unilaterales de Aznar para reformar la educación, la ley de protección del desempleo y la ley de extranjería, aprovechando la mayoría absoluta del gobernante Partido Popular (PP) en el Congreso, han provocado en España una ruptura del diálogo social. Las consecuencias están a la vista: ha sido convocada una huelga general para el 20 de junio y los estudiantes están en pie de guerra, llamando incluso a la "desobediencia civil".

El debate por el trato que reciben los migrantes en los centros de retención o en las fronteras y los aeropuertos españoles aumenta, y se espera un endurecimiento de la polémica ley de extranjería.

Precisamente hoy se registró en Melilla un hecho dramático: un menor magrebí murió cuando intentaba cruzar la frontera española, al quedar aprisionado en una reja cerrada mecánicamente por agentes de la Guardia Civil. Mientras, la afluencia de pateras -pequeñas embarcaciones de madera en las que suelen cruzar el estrecho de Gibraltar los migrantes norafricanos- no cesa, y sólo este domingo fueron detenidas 58 personas en Tarifa y otras 53 en la isla canaria de Fuerteventura.

Un editorial del diario El País del sábado pasado reflejaba la situación política que se vive bajo la administración Aznar: "Nada nuevo bajo el sol. Muchas de las recientes iniciativas gubernamentales, desde la reforma de la enseñanza a sus actitudes sobre el problema de la inmigración, responden a ese mismo talante (autoritario), aliado con una concepción unívoca de España y la democracia", lo que "pone en peligro el delicado sistema de negociación y acuerdo con las fuerzas sociales que exige una sociedad democrática avanzada".

Las medidas de Aznar contra las prestaciones laborales, algunas alcanzadas después de muchos años de lucha obrera, también preocupan a los sindicatos europeos, que ayer mismo, por conducto de la Confederación Europea de Sindicatos (CES), subrayaron que la presidencia de Aznar en la UE "quedará marcada como el inicio de la más grave ofensiva contra los derechos de los trabajadores europeos".

La CES, que en la reciente cumbre de Barcelona convocó a 150 mil personas para impugnar las reformas neoliberales emprendidas por Los Quince, pretende movilizar a todas sus organizaciones para defender el "Estado social europeo" y para que se garantice "el diálogo social contra las imposiciones gubernamentales", algo que a juicio de la confederación se ha producido sobre todo en la Italia de Silvio Berlusconi y en la España de Aznar.

Una primera respuesta a la reforma a la ley de protección al desempleo se registró hoy en España en las zonas agrícolas de Andalucía y Castilla La-Mancha, ante la inminente derogación de un subsidio agrario gracias al cual viven miles de familias de pequeños y medianos agricultores. Unos 5 mil olivareros en Jaén cortaron una de las carreteras de mayor circulación para "impedir que las políticas (de Aznar) entren en Andalucía".

A pesar de la presencia policiaca no se produjeron incidentes; en cambio, en la localidad castellana de Almuradiel, la policía rechazó con gases lacrimógenos a unos mil jornaleros que intentaron protestar en la misma carretera.

Pero aun con estas movilizaciones, Aznar reiteró este domingo que las reformas se hicieron por decreto porque "10 millones de españoles" lo eligieron presidente "para gobernar y tomar decisiones".

Desde la oposición socialista, José Blanco apuntó que el mandatario conservador se "está convirtiendo por su soberbia, prepotencia y por su mayoría absoluta en el piquete más activo para garantizar el éxito de la huelga general" del 20 de junio, mientras que desde Izquierda Unida (tercera fuerza) se afirmó que Aznar "sólo se preocupa en beneficiar a la patronal".