Acto anual en memoria de los fallecidos por el VIH/sida

Se realizó la 15 Caminata Nocturna Silenciosa por la Vida

No más muertes por ignorancia o por pobreza, expresaron

ANGELES CRUZ

El silencio es el más grande de los reclamos. "No tenemos que gritar, queremos que nos vean. Que a nadie se le olvide: todos estamos en riesgo". El sida existe y está muy cerca. Por eso, por la vida... con condón.

Ayer se realizó la 15 Caminata Nocturna Silenciosa por la Vida, en memoria de los fallecidos a causa de la pandemia. Más de 30 organizaciones civiles y cientos de en-fermos estuvieron ahí como cada año, porque ante tantos muertos no queda más que seguir caminando para exigir que la prevención sea, de una vez por todas, la más importante de las acciones del gobierno en esta y en todas las áreas de la salud.

Mientras eso no se haga "seguiremos lamentando el incremento en el número de enfermos y de muertos", porque no sólo falta la información, sino también el acceso a un servicio médico de calidad y a los tratamientos que ahora ya permiten una mayor esperanza de vida.

La jornada empezó desde el mediodía con el tianguis informativo que se instaló en la Alameda Central, y en donde los paseantes recibieron todo tipo de folletos que explican qué es el VIH/sida y cómo se puede prevenir. Los condones circularon al por mayor y tampoco faltaron las pláticas sobre el condón femenino y los diversos objetos que a la hora de la relación sexual son útiles para proteger contra la infección.

Después, la caminata encabezada por la Casa de la Sal, organización que se dedica a la atención de los niños con VIH/sida. En seguida, una cruz formada con claveles rojos, con la que "recordamos a nuestros muertos. Significa fe y esperanza de un mundo mejor para todos", explicó Fernando, uno de los jóvenes que, vestido de monje -y portador del virus desde hace 13 años-, cargaba la cruz.

-ƑPor qué estás aquí?

-Porque quiero que la gente se dé cuenta de que es cierto. El sida existe. Yo lo tengo y no quisiera ver a más enfermos ni presenciar más muertes. Ya he visto muchas.

-ƑA qué aspiras?

-A cumplir otros 13 años como portador del virus y que llegue el día en que las personas no se tengan que enfermar de sida para convencerse de que deben cuidarse en todas sus relaciones sexuales.

Era la vanguardia de la caminata que un poco después de las 7 de la noche inició su recorrido sobre avenida Hidalgo, rodeó la Alameda para tomar Juárez y luego Madero rumbo al Zócalo, donde las velas de la esperanza y el recuerdo de cada uno de los muertos se hizo patente.

Esta vez la lucha contra el sida tuvo como acompañantes a los maestros de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación que están en plantón en la capital del país, y a quienes Carmen Soler, directora del Programa de VIH/Sida del Distrito Federal, les agradeció su solidaridad por compartir ese espacio con ellos.

Lo primero, como cada año, la lectura de los nombres de quienes han fallecido a causa del sida. Una lista muy larga todavía, lamentó Soler, y en seguida señaló: "nuestro empeño está en lograr que no mueran más jóvenes. Pero necesitamos el esfuerzo de todos".

Según información de la Secretaría de Salud, hasta el 31 de diciembre de 2001 se habían registrado 52 mil personas enfermas de sida, pero considerando el subregistro se estima que en el país existen en realidad 64 mil afectados, así como entre 116 mil y 177 mil portadores del virus.

Ana María Mata, directora de la Fundación Diarq, señaló que a casi 20 años de que la enfermedad llegó a México "ha habido algunos avances", pero falta más. Por ejemplo, que en el IMSS sean escuchados los enfermos, y se haga todo para terminar con el desabasto intermitente que padecen los derechohabientes, que atenta contra sus vidas.

El recuerdo de ayer fue para quienes se fueron por ignorancia, o por ser pobres, sin acceso a la atención médica. Algunos tal vez sin el apoyo de sus familias y orillados a vivir sus últimos días en la marginación. Por todos ellos, que fueron hijos, hermanos, tíos, amigos, "caminaremos hasta que las condiciones que influyeron en su pérdida no se repitan más", porque "la prevención es el camino por la vida".