Supera los 600 mil millones de pesos anualmente,
reconoce Hacienda
Creciente evasión fiscal; ganancias de empresarios
equivalen a 65% del PIB
Las remuneraciones de trabajadores, en continuo deterioro
desde hace 20 años, asegura el INEGI
ROBERTO GONZALEZ AMADOR Y ANTONIO CASTELLANOS
La detención en el transcurso de este sexenio de
33 empresarios acusados de defraudación fiscal no ha sido suficiente
para revertir la evasión en el pago de impuestos, una práctica
que, ha reconocido la Secretaría de Hacienda y Crédito Público
(SHCP), supera los 600 mil millones de pesos al año. Este monto
ha crecido al mismo tiempo que se incrementa la participación de
las ganancias empresariales en el producto interno bruto (PIB).
La evasión fiscal representa una auténtica
"sangría" para las finanzas públicas, las que a su vez continúan
en constante deterioro. La cantidad de dinero que cada año deja
de percibir el fisco por el hecho de que las empresas no pagan debidamente
sus contribuciones, es apenas inferior al saldo de los pasivos totales
a cargo del Instituto para la Protección al Ahorro Bancario (IPAB),
que en diciembre pasado alcanzaron 788 mil 304 millones de pesos, que deberán
ser pagados con cargo a los contribuyentes en al menos tres décadas.
Reforma fiscal insuficiente
Después de que la reforma fiscal aprobada por el
Congreso en diciembre pasado demostró haber sido insuficiente para
elevar la recaudación de impuestos, como lo revela el hecho de que
en el primer trimestre de este año los ingresos fiscales fueron
inferiores a lo programado en 19 mil 500 millones de pesos, especialistas
consideran que la mejor forma de aumentar los recursos disponibles para
el Estado está por el lado de combatir la evasión, una práctica
extendida en el país.
Así lo considera José Chanes Nieto, doctor
en derecho, investigador y catedrático de la Universidad Nacional
Autónoma de México. El especialista sostuvo que antes de
establecer nuevos impuestos, cuya ineficacia quedó demostrada en
el primer trimestre de este año, el gobierno federal debe mejorar
la administración fiscal, porque hay una ineficiencia reconocida
por las autoridades hacendarias para el cobro de impuestos. Afirmó
que cálculos conservadores indican que por cada 100 pesos que se
recaudan hay otros 20 que no son captados.
El aumento de la evasión guarda una relación,
al menos estadística, con el aumento de las ganancias empresariales
en el país, como se desprende de varios informes oficiales.
Las ganancias obtenidas por el sector empresarial crecieron
en las anteriores dos décadas hasta representar dos terceras partes
del PIB, mientras que el monto total de las remuneraciones percibidas por
los trabajadores -que son, en todo caso, contribuyentes cautivos del fisco-
han experimentado en el mismo periodo un continuo deterioro, según
establecen reportes del Instituto Nacional de Estadística, Geografía
e Informática (INEGI).
Son un reducido grupo de empresas y personas que cuentan
con la mayor parte de recursos en el sistema financiero, en una cantidad
que no corresponde con la baja tributación al fisco.
Indicadores del Banco de México y del IPAB señalan
que el universo de ahorradores bancarios está compuesto por 28.5
millones de contratos que acumulan el total de un billón 19 mil
963.1 millones de pesos, sin contar el saldo de operaciones de banca de
inversión, que es de 822 mil 67.2 millones de pesos.
Sólo 1 por ciento de los depósitos en la
banca comercial tiene recursos por más de 300 mil millones de pesos,
que representan 30 por ciento del total; 52 por ciento de los ahorradores
bancarios tienen contratos con un promedio ligeramente superior a 500 pesos.
El siguiente rubro incluye depósitos entre mil y 5 mil pesos. Mantiene
un saldo de 19 mil 951.9 millones de pesos en un total de 5 millones contratos.
Con base en información del Sistema de Cuentas
Nacionales de México, el INEGI establece que la ganancia empresarial
derivada de las actividades productivas equivale actualmente a 65 por ciento
del PIB, en tanto que la remuneración percibida por los asalariados
sólo representó 34.5 por ciento del producto interno bruto
y los "otros impuestos a la producción", fueron equivalentes al
0.5 por ciento restante.
Estas cifras contrastan con la situación
que prevaleció hace dos décadas, periodo que comprende el
inicio de las reformas económicas de apertura y privatización,
que han dado mayor poder económico al sector privado.
Hace 20 años, el monto de las remuneraciones percibidas
por los trabajadores significaba 45 por ciento del PIB, en tanto que las
ganancias empresariales representaban 54 por ciento y los impuestos a la
producción el restante 1 por ciento.
Al inicio de la década de los 90, el impuesto sobre
la renta pagado por las empresas representaba 3.1 por ciento del PIB, cifra
que ha disminuido a 2.5 por ciento, según información de
la SHCP.
El año pasado, el gobierno federal y el Congreso,
dominado por la oposición, se trabaron en un debate sobre la reforma
al sistema tributario. En diciembre fue aprobada una reforma que, de acuerdo
con legisladores, aumentaría en 130 mil millones de pesos de pesos
el monto disponible de ingresos fiscales.
El primer resultado de esas modificaciones fue, por decir
lo menos, pobre. Información de la SHCP establece que en el primer
trimestre de este año el deterioro de las finanzas públicas
fue menor al previsto. En el periodo se registró un déficit
de 6 mil 400 millones de pesos, que contrasta con un superávit de
13 mil 300 millones de pesos en el mismo periodo de 2001.
En el padrón de contribuyentes al fisco existen
actualmente 5 millones de personas físicas con actividad empresarial,
un rubro que comprende pequeñas empresas, agricultores, ganaderos,
pescadores, silvicultores, todo el sector primario y profesionistas. Existen
registradas 600 mil sociedades y otros 13 millones de trabajadores, además
de los 2.5 millones de empleados públicos.
El titular de la SHCP, Francisco Gil, detalló que
en los primeros cuatro meses de este año ya fueron encarceladas
15 personas por defraudación fiscal. En todo el año pasado,
por el mismo delito, fueron procesados 18 evasores y siete en 2000. Los
montos evadidos por los detenidos en este año alcanzan 586 millones
de pesos.
Dar fin a regímenes especiales
El doctor Chanes Nieto, quien ahora contiende por la presidencia
del Instituto Nacional de Administración Pública (INAP),
lanza algunas propuestas: el gobierno, dice, debe poner fin al subsidio
fiscal a los banqueros, por el que este sector no ha pagado hasta ahora
impuestos por casi 45 mil millones de pesos. También, señala,
es necesario acabar con sistemas de tributación preferencial, como
el de transportistas y agricultores o en las tarifas eléctricas
para las grandes industrias
Señala que el trabajo de la administración
pública federal, estatal y municipal en cuanto a capacidad para
recaudar impuestos deja mucho qué desear. A los municipios se ha
aumentado el monto de contribuciones, aunque en algunos casos esos recursos
son empleados en la compra de bienes suntuarios, como camionetas, arreglar
plazas y adoquinar calles.
La corrupción persiste porque también hay
un sistema judicial que no responde a las necesi-dades del país,
que debe ser revisado y transformado a fondo para simplificar la administración
de justicia. Las propias leyes han favorecido a los delincuentes y quienes
cometen delitos como varios banqueros que andan libres, expuso el candidato
a la presidencia del INAP, agrupación en donde las elecciones para
el cambio de dirigencia debieron efectuarse desde diciembre pasado. Demandó
claridad en el proceso para suceder al actual presidente, José Natividad
González Parás.
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