Se deslindan órganos directivos de acuerdos al margen de la institucionalidad

Asumirán dirigencia el viernes Círigo y Guerrero

Se cumplió la petición al Congreso Nacional del PRD de atender inconformidades, señalan

RAUL LLANOS SAMANIEGO

Será el próximo viernes, a las seis de la tarde, cuando el Consejo Estatal del PRD se reúna para tomarle la protesta a Víctor Hugo Círigo Vázquez y a Agustín Guerrero, como presidente y secretario general, respectivamente, para los próximos tres años, luego de dos meses y una semana de haberse realizado elecciones internas.

Así lo anunciaron ayer en conferencia de prensa el presidente de la mesa directiva del cuarto Consejo Estatal, Ernesto Jiménez Ollin, y los dirigentes interinos del sol azteca, Porfirio Martínez y Agustín González, quienes se deslindaron de cualquier negociación o acuerdo político al margen de la institucionalidad del partido. Argumentaron que tal decisión se tomó debido a que se cumplió con la petición hecha al Congreso Nacional perredista de atender las inconformidades surgidas luego de las votaciones del 17 de marzo pasado.

"Se cambió totalmente a los integrantes de la Comisión Nacional de Garantías y Vigilancia y del Servicio Electoral Nacional, y lo más importante es que se formó, por mandato del Congreso Nacional, una comisión especial de legalidad y transparencia que examinará todos los actos que se han denunciado y que propiciaron un clima de inestabilidad, incertidumbre y desprestigio de nuestro partido", explicó Porfirio Martínez.

A su vez, Ernesto Jiménez precisó que se propondrá a los integrantes del cuarto Consejo Estatal que el Congreso Estatal (donde habrá de designarse a una parte de los integrantes del quinto Consejo Estatal) se efectúe el 8 de junio, y un día después se realice el mencionado quinto consejo, el cual habrá de nombrar a quienes integrarán el Comité Ejecutivo Estatal.

Comentó además que se solicitó formalmente al Servicio Electoral Nacional que le envíe la lista de los congresistas y consejeros electos el pasado 17 de marzo, ya que sin ella será difícil instalar ambas instancias de dirección del sol azteca.

Añadió que en el Congreso habrán de discutir, de manera fundamental, la línea política del partido, que estará orientada hacia los comicios de 2003, y por ende se definirán las tareas prioritarias para ganar dichas elecciones constitucionales.

Por su parte, Agustín González comentó que esta salida "no es negociada, no es un acuerdo pactado, es solamente allanar el camino a la legalidad, allanar el camino por la transparencia", y por ello deslindó al CEE y a la mesa directiva del Consejo Estatal de cualquier mecanismo acordado al margen de la institucionalidad y los canales oficiales del PRD.

Finalmente, Porfirio Martínez rechazó que todo el conflicto poselectoral, las acusaciones de mapachería y las denuncias entre los mismos perredistas vayan a representar costos políticos que tengan que pagar en los comicios del año próximo, por el contrario, dijo, "yo creo que tenemos tiempo para recuperar la confianza de los ciudadanos por la manera en que se va a recomponer el partido, tanto a nivel nacional como a nivel estatal.