Se culpan mutuamente los grupos que disputan la presidencia municipal
Continúan zozobra y confusión en Pinotepa Nacional tras la balacera del sábado pasado
Dos mujeres heridas se niegan a ser atendidas por miedo a ser encarceladas
ROSA ROJAS/I ENVIADA
Pinotepa Nacional, Oax., 1Ɔ de mayo. "Los muertos de ustedes, ustedes los entierran", cuenta Jorge Adrián Fuentes Baños, ex candidato del Partido de la Revolución Democrática (PRD) a la presidencia municipal, que les advirtió el gobernador de la entidad, José Murat, hace un par de meses, a los integrantes del Frente por la Dignidad de Pinotepa (FDP) que fueron a negociar con él la solución al conflicto poselectoral, que hace que este municipio tenga un presidente municipal popular y otro constitucional, que el ayuntamiento esté tomado desde el día de las elecciones y que aquí se viva en constante zozobra.
El FDP se integró el 7 de octubre, día de las elecciones municipales, luego de ver el "gigantesco fraude electoral" que se cometió en esa ocasión. Primero lo formaron el PRD y el PT, cuyo candidato fue Librado Baños, dirigente de la Unión Cívica Democrática de la Costa Chica y la Sierra Sur de Oaxaca (Ucidebacc), y después se les sumó el PAN, cuyo candidato a la presidencia municipal fue Alfredo Ramírez Castañeda. Este último y Fuentes Baños son ahora parte del ayuntamiento popular que preside Librado.
Dos muertos enterró ya el FDP, el pasado domingo 28 de abril: los integrantes de la policía municipal popular Juan Dionisio López Mejía y Víctor Hernández Mejía. En total fueron 14 los heridos resultantes de la balacera ocurrida aquí el sábado 27 de abril entre policías preventivos estatales, policías municipales populares y "paramilitares armados por el presidente municipal constitucional" -del PRI-, Conrado Rodríguez Peláez.
En Acapulco está hospitalizado un herido grave; desperdigadas por la ciudad andan otras personas aún con balas en el cuerpo, entre ellas Artemia Pacheco Martínez -45 años, seis hijos- y Esperanza Miguel Gaytán -51 años, tres hijas-, quienes resultaron heridas de bala en los pies cuando iban a comprar tortillas, por lo que permanecen escondidas, en pésimas condiciones de higiene, acostadas ambas en un petate, recibiendo algunas curaciones clandestinamente porque tienen miedo de que las detengan y se las lleven a la cárcel si se presentan a declarar, como ocurrió con algunos otros de los heridos.
En el Hospital de Jesús se encontraba muy grave esta tarde Ramón Luis Alberto Torres, esperando que "alguien" se haga responsable de los gastos de la operación que requiere urgentemente. Ya se había suspendido la intervención quirúrgica, que estaba programada a la una de la tarde, para tratar de reconstruirle el ano y la uretra, destruidos por una bala -al parecer de R-15- disparada no sabe si por la preventiva o por la gente de Conrado; mientras su hermana, María Elena, lamentaba con desesperación que ya debía 16 mil 924 pesos de las operaciones que le hicieron para sacarle la bala, a lo que se sumaría el costo de la nueva intervención quirúrgica.
"El trabajaba de policía popular sin sueldo. Jorge Fuentes, el del PRD, habló ayer con el delegado de gobierno, Felipe Rodríguez, y él habló a Oaxaca con el secretario de gobierno. Anoche dijo que viniéramos con el juez para que haga un escrito diciendo que él cubre los gastos", indicó antes de salir corriendo al juzgado para hablar con el juez.
Ahí también estaba internado Adán López Mejía, otro policía popular y hermano del difunto Juan Dionisio, con una herida de bala en el cuello. El estaba por ser dado de alta, en cuanto "alguien" se hiciera responsable de pagar los 10 mil pesos de su atención médica. Policías ministeriales que vigilaban el hospital -Ramón Luis y Adán están en calidad de detenidos- lo trasladarían inmediatamente que saliera, no sabían si al penal de Jamiltepec o al de Pochutla; a este último llevaron a otros seis policías populares al salir del hospital.
Curiosamente sólo uno de los encarcelados es gente de Conrado Rodríguez: Juan Isidro Vargas, detenido por policías preventivos el sábado 27, antes de la balacera, porque le disparó en la mano a un policía popular que lo detuvo para decomisarle una patrulla del ayuntamiento popular.
De acuerdo con los testimonios de los integrantes del FDP, ese incidente fue el que dio origen a la balacera posterior, en la que, afirman, ninguno de los policías populares disparó, sino que lo hicieron sólo los preventivos y los "paramilitares" de Conrado Rodríguez.
Por otra parte, aunque Rodríguez afirma que fueron los policías populares los que dispararon, y que los preventivos lo hicieron al aire, nadie del ayuntamiento constitucional ni de los preventivos salió herido.