Se profundizan los problemas económicos por la austeridad presupuestaria, afirma
Las reformas a la Ley del IMSS no bastan para afrontar la crisis financiera: Levy
Fox reconoce en el instituto al "más sólido pilar de la seguridad social" en el país
ANGELES CRUZ
Las reformas a la Ley del IMSS aprobadas en diciembre pasado por el Congreso de la Unión no son suficientes para enfrentar la severa crisis financiera de la dependencia. Los próximos años serán difíciles e incluso se pueden generar fricciones y dificultades, admitió el director general de la institución, Santiago Levy Algazi, al presentar el informe de actividades 2001 y el plan de trabajo para este año, durante la nonagésima asamblea general ordinaria.
Dijo que la problemática financiera es en extremo compleja y se profundiza por la austeridad presupuestaria con la que se tienen que desarrollar las actividades de la institución. La semana pasada, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público informó que el más reciente recorte presupuestal del gobierno federal de 10 mil cien millones de pesos afectará al IMSS con 2 mil 563 millones, cifra que duplica el ajuste del gasto que sufrió en 2001, cuando se ubicó en mil 237.6 millones de pesos.
Sin embargo, el presidente Vicente Fox Quesada resaltó que el IMSS es el más sólido pilar de la seguridad social del país porque cubre a 57 millones de personas. En este espacio se han impulsado los mejores programas y políticas para aumentar la calidad de vida de millones de trabajadores y sus familias, dijo.
Antes de clausurar la asamblea del IMSS, el mandatario puso a la institución como ejemplo de lo que puede lograrse con el diálogo y el consenso. Esto es lo que necesitamos, expresó en alusión a la composición tripartita de la dependencia, "anteponer los intereses de México sobre cualquier otro, formar un solo, un gran equipo con responsabilidad y visión de futuro.
"Sólo si actuamos de manera conjunta y con un trabajo de equipo sacaremos adelante los grandes retos que tenemos enfrente", afirmó.
Las dificultades económicas, sin mención
No hizo ninguna mención a la crisis económica del instituto. En cambio, el jefe del Ejecutivo mencionó las recientes reformas legales, con las que se favorece la constitución de un sistema moderno de reservas financieras, necesario para garantizar la viabilidad de la institución. El instituto es ya un órgano fiscal autónomo y cuenta con un régimen presupuestario ágil, apuntó.
Con la nueva Ley el Seguro Social se coloca al día y a la vanguardia, además de que se refuerza su indiscutible carácter público y tripartita. De hecho, indicó, estas dos características son escudos que le permitirán salir avante en cualquier lucha.
Luego de entregar los premios de calidad a los médicos que el año pasado se distinguieron por su trabajo con los pacientes, Fox Quesada se refirió a los "avances" en la mejora de la calidad. Según los datos proporcionados por el IMSS, el servicio de cita previa contribuyó a disminuir los tiempos de espera de 25 a 21 minutos.
De la misma manera, recordó el aumento otorgado a los jubilados y pensionados del Seguro Social, sector que durante mucho tiempo fue descuidado. Hay que reconocer, dijo, que con su trabajo y su esfuerzo ellos fueron los constructores de nuestro país. En cambio, la inflación y los vaivenes económicos se encargaron de negarles el fruto de su empeño.
Por su parte, y ante los integrantes del Consejo Técnico del IMSS y funcionarios del gobierno federal, Levy Algazi afirmó que los pasivos laborales derivados del compromiso del instituto como patrón y los pasivos contingentes de los ramos de aseguramiento en su calidad de entidad aseguradora constituyen aspectos fundamentales de la crisis.
Lo anterior, aunado a la dinámica demográfica y epidemiológica que vive el país, hará muy difícil mantener los de por sí ya bajos niveles de gasto en conservación, mantenimiento y equipamiento, alertó el funcionario.
El director general del instituto declaró que para 2002 la dependencia no cuenta con recursos para contratar nuevas plazas. En su informe de actividades, Levy detalla que el presupuesto para inversiones en este año es de apenas mil 900 millones de pesos, cuando en la última década la constante había sido de 4 mil 500 millones de pesos anuales. Esto es así a pesar de que en ese periodo la derechohabiencia creció en más de 20 por ciento, subrayó.
No obstante, dijo que México puede y debe extender la cobertura de la seguridad social a los grupos aún excluidos como son los pobres, los trabajadores del sector informal y los migrantes. Para ello, apuntó, se requiere renovar el concepto de seguridad social y desligarlo de su vinculación con el mercado formal de trabajo.
Señaló que con ese objeto habrán de unificarse los diferentes esquemas actualmente disponibles para ampliar la cobertura (IMSS-Solidaridad, programa Oportunidades para los jornaleros agrícolas, el seguro popular y el seguro de salud para la familia). Para ello tendría que existir un solo marco conceptual y jurídico que establezca la seguridad social como una prestación universal, señaló.
Los cambios legales recientes están encaminados en esa ruta y ahora el IMSS está facultado para ofrecer seguros de vida y de otro tipo a la población no derechohabiente de menores ingresos, añadió. Se les puede dar atención médica con cargo al presupuesto federal, explicó.
En su presentación, el funcionario hizo un recuento -que luego repetiría el presidente Fox- de los beneficios que trajo consigo las nuevas reformas a la ley, las que sin embargo no son la solución a la problemática de la institución. Constituyen sólo un marco jurídico para construir una solución, puntualizó.
Una muestra de la gravedad de la problemática financiera está en que resultado de la cada vez menor cantidad de dinero destinada a la inversión física hoy en día existen seis hospitales y 14 unidades de medicina familiar nuevas que no funcionan por falta de recursos económicos.
El tema fue abordado en el informe de la Comisión de Vigilancia, la que resaltó la necesidad de que en el futuro no se programen obras nuevas o de remodelación si no existe la certeza de que se tendrán los recursos indispensables para concluirlas, así como para contratar al personal que laborará en dichas áreas.
El texto, leído antes de la clausura de la asamblea general ordinaria, menciona como ejemplo el caso del área de urgencias del Hospital General de Zona de Oaxaca. Desde 1999 se iniciaron los trabajos de remodelación y a la fecha están inconclusos.
Al respecto, el dirigente del Sindicato Nacional de Trabajadores del IMSS, Fernando Rocha Larráinzar, dijo que se requieren 12 mil 500 nuevos lugares de trabajo, la mayoría de médicos y enfermeras. Sin embargo, por el recorte presupuestal -que a decir del líder es ilegal- el instituto no está en condiciones de contratar al personal que se requiere.
Explicó que al ajustar el gasto del IMSS la SHCP ignoró el nuevo carácter legal de la dependencia, de organismo fiscal autónomo. Informó que solicitará a los legisladores que emitan un punto de acuerdo a este respecto.
El informe de actividades de 2001 detalla que el número de afiliados al 31 de diciembre pasado ascendió a 10 millones 713 mil 268 individuos, los que sumados a sus dependientes y a los 10 millones 579 mil 800 beneficiarios del programa IMSS-Solidaridad, completaron 56 millones 452 mil 203 derechohabientes, es decir, 56 por ciento de la población nacional.
Sin precisar cifras, el documento menciona que la desaceleración económica provocó la pérdida de empleos, y aunque hasta marzo se habían recuperado 89 mil 280 puestos de trabajo, son insuficientes para generar ingresos adicionales para el IMSS.
En 2002 la situación financiera será más compleja, porque con un presupuesto ligeramente inferior al del año pasado el IMSS "deberá asimilar el impacto del incremento en los salarios, en el costo de sus insumos y en las pensiones, con una meta de constitución de reservas muy ambiciosa para sus circunstancias actuales".
Los ingreso del IMSS en 2001 ascendieron a 156 mil 384 millones de pesos, mientras los egresos se ubicaron en 146 mil 777 millones de pesos. Las reservas financieras consolidadas fueron del orden de 27 mil 528 millones de pesos, cifra superior en 37.7 por ciento con respecto al cierre de 2000.