Presentó su libro Quimeras y tonadillas
Rinden homenaje al compositor Vicente Garrido, creador
del filin mexicano
JAIME WHALEY
En velada de romanticismo a toda prueba, Vicente Garrido,
para muchos el creadordel filin mexicano, recibió el reconocimiento
de sus fieles al presentar su libro Quimeras y tonadillas.
Rodeado
de varios de sus afectos familiares como lo son sus hijos, los de él
y los de su segunda esposa, sus nietos ?que suman 25? y desde luego de
su mujer, María de la Luz Vergara, quien se asume como una digna
compañera, a sus casi 78 años, Garrido recibió el
homenaje de propios, pero no de ajenos, pues, como alguien señaló:
¿quién puede ser indiferente al romanticismo?
Figuras del mundo político y artístico se
dieron cita, a la par de buena cantidad de público convocado por
una radiodifusora, para el tributo que en la parte melódica contó
con la espléndida voz de Eugenía León, acompañada
en los teclados por el mismísimo homenajeado y los comentarios,
más que al libro, a la prolífica vida de Garrido, quien añadió
jiribilla a lo comentado diciendo que no sabía si la multitud ahí
reunida asistía a sus canciones o a una presentación de Luis
Miguel.
''Vicente es de los compositores que rompen el estilo
del bolero tradicional y le da un toque armónico muy dificil, y
junto con Luis Demetrio, Mario Ruiz Armengol y a lo mejor Armando Manzanero,
le dieron al bolero un formato musical urbano'', afirmó Mario Moya
Palencia, en otros tiempos secretario de Gobernación, embajador
y hoy dedicado a la docencia y a la escritura. Moya recordó que
fue él quien presentó a Garrido con un compositor cubano
(¿se puede hablar de Cuba en estos momentos?, se preguntó
irónico el también ex embajador de México en la isla),
nada menos que Pablo Milanés ?el lado interpretativo del filin
antillano luego de sus creadores: César Portillo de la Luz y José
Antonio Méndez? en Nueva York, hace 10 años, y luego actuaron
los dos acompañados por Argelia Fragoso, bolerista non, rememoró
Moya.
No me platiques más, en la voz de Eugenia,
propició un prolongado aplauso luego de que Germán Dehesa
disertó sobre el significado del vocablo escandir, que, dijo, es
el noble arte de combinar los silencios, los acentos y las palabras. Arte
dominado, a su vez, por Garrido. Antes, el escritor arrancó la risa
de los asistentes cuando, en clara referencia al diferendo entre Fox y
Castro, señaló que Caperucita le dio más pelea al
lobo.
El libro, en el que están incluidas un centenar
de composiciones de Garrido, fue elaborado por su hija Concepción
y editado por la empresa de Carlos Castillo, de Monterrey. Marco Antonio
Muñiz, presente también, calificó a Garrido de baluarte
de la composición, ''un ángel de la guarda del intérprete'',
y dijo que tuvo la satisfacción de hacer pública y famosa
una canción, No me platiques más, ''hace un chorro
de años'', cuando cantaba con Los Tres Ases, y que ya después
se pegaron Lucho Gatica y otros.
Por su parte, Pedro Ferriz recordó cuando Garrido
formó, junto con los cómicos Viruta y Capulina, el trio Los
Excéntricos del Ritmo, y a él le tocaba presentarlos en los
programas radiofónicos de la XEQ.
Una larga fila, interminable, se formó frente al
compositor al final del ágape, auspiciado por una empresa vitivinícola,
y Garrido, que está en recuperación de un segundo infarto,
atendió pacientemente a cada uno de los solicitantes. Luego de más
de una hora de autógrafos, el compositor, apoyado en su bastón,
respondió afirmativamente a la pregunta de una de sus nietas: ¿Estás
feliz, abuelito?