Con una conferencia magistral el historiador
reactivó la Cátedra Octavio Paz
La voz de León-Portilla hizo resurgir cantos
y ''sueños de palabras'' de la poesía náhuatl
Los 600 años del natalicio del rey poeta Nezahualcóyotl,
invocación inevitable
El pensamiento prehispánico permeó la
obra del autor de El laberinto de la soledad
ARTURO JIMENEZ
El universo simbólico del mundo prehispánico,
así como los varios rostros y tonos de la poesía náhuatl
con sus cantos de guerra, de reflexión, de erotismo y sus llamados
''sueños de palabras", resurgieron la noche del lunes en la voz
del historiador Miguel León-Portilla.
Y con su conferencia magistral Rostros de la poesía
náhuatl. Evocando a Octavio Paz, el investigador también
participaba en el resurgimiento de la cátedra extraordinaria que
lleva el nombre del autor de El laberinto de la soledad.
Durante
la charla en la librería Octavio Paz del Fondo de Cultura Económica,
en Chimalistac, el autor de Los antiguos mexicanos a través de
sus crónicas y cantares ofreció al numeroso público,
más que un análisis, un recital gozoso de ''flor y canto",
como los mesoamericanos denominaban a la poesía.
Presentado por Gonzalo Celorio, director del FCE, León-Portilla
hizo un recuento del mundo simbólico náhuatl y mencionó
la importancia de éste en la obra de Paz. Pero sobre todo leyó,
por momentos con traducción intercalada al náhuatl, cosas
como: ''De prisa, en un día, pasó la flor de la guerra, tu
palabra, Cuauhtémoc".
Entre los rasgos de la poesía náhuatl el
estudioso mencionó características como las frases paralelas:
por ejemplo, ''casa de turquesas", considerada como casa de serpientes.
Entre los temas recurrentes, el de la muerte. Y reconoció la presencia
de elementos repetitivos en el repertorio de metáforas de esta poesía
tan antigua y actual.
Inevitable fue la invocación de Nezahualcóyotl,
incluso más si se considera la conmemoración este 2002, año
tres conejo, de los 600 años de su natalicio. Citó un ''canto
de reflexión" del rey poeta:
''Por fin lo comprende mi corazón, escucho un canto,
contemplo una flor, ojalá que no se marchite. No acabarán
mis flores, no cesarán mis cantos, yo cantor los elevo. Se reparten,
se esparcen, aun cuando las flores se marchitan y amarillecen, serán
llevadas allá, al interior de la casa del ave de plumas de oro."
Y recreó un poema que ''honraría a cualquier
literatura", con el que el señor de Texcoco ''se voló la
barda". Es un canto que compara al ''dador de la vida" con un escribano:
''Con flores escribe el dador de la vida, con cantos das
color, con cantos sombreas a los que han de vivir en la tierra. Después
destruirás a águilas y tigres. Sólo en tu libro de
pinturas vivimos, aquí sobre la tierra. Con tinta negra borrarás
lo que fue la hermandad, la comunidad, la nobleza. Sólo en tu libro
de pinturas vivimos aquí sobre la tierra."
El rey poeta, expresó León-Portilla a la
prensa al final de su conferencia, "siempre ha estado presente en la conciencia
de México y fue una gran figura de nuestra historia". Por cierto,
el especialista ofrecerá este viernes, día del nacimiento
del estadista prehispánico, la conferencia Nezahualcóyotl,
600 años de presencia. El lugar, Texcoco, donde nació
el personaje.
Sensuales mujeres de Chalco
León-Portilla recordó además un diálogo
prehispánico en forma lírica acerca de qué es flor
y canto: ''Uno dice que es aquello con lo que nos embriagamos, como si
consumiéramos hongos alucinantes; otro agrega que es con lo que
techo mi cabaña en el bosque para sentirme de alguna manera con
calor. Otro añade: flor y canto es un don de los dioses, pero nuestra
inventiva la echa a perder".
Trajo a cuenta el Canto de las mujeres guerreras de
Chalco y explicó que éstas fueron a ver al rey Axayácatl,
quien había conquistado ese lugar, y lo retaron mediante poesías
cargadas de erotismo. ''Es un reto sexual tras el que le dicen lo que tiene
que hacer, con todos sus colores: 'Ven a unirte, ven a unirte, es mi alegría,
dame ya al pequeñín, déjalo ya colocarse'".
Acerca de la referencia a la muerte en varios cantos nahuas,
incluidos los de tono erótico, León-Portilla comentó:
''Es un mundo un tanto maravilloso y terrible. Y como decía Paz,
a veces me da miedo".
Al final confió: ''Quiero con esto rendir un homenaje
más a Octavio en esta casi conmemoración del cuarto aniversario
de su muerte, el 19 de abril pasado".
Y después, a la prensa: ''En cualquier texto de
Paz pueden encontrarse páginas dedicadas al arte indígena,
a la mitología y a la poesía. Y también hay influencias
del pensamiento indígena en su propia obra. Incluso, con metáforas
del mundo prehispánico explica el México de hoy".