Busca el presidente argentino respaldo entre
gobernadores, legisladores y el PJ
Renuncia el equipo económico de Duhalde
La crisis es enorme; no es momento de adelantar elecciones,
dicen allegados al gobierno
STELLA CALLONI CORRESPONSAL
Buenos Aires, 23 de abril. Cuando el país
está al borde de un nuevo colapso y arrecia la protesta popular,
ante una economía completamente paralizada a la que se suma un feriado
bancario que ha dejado las calles sin un peso, el presidente Eduardo Duhalde
aceptó este martes la renuncia de su equipo económico y buscó
el respaldo de gobernadores, legisladores y la cúpula de su Partido
Justicialista (peronista).
Toda la jornada Duhalde mantuvo reuniones para encontrar
una salida a la crisis provocada por el rechazo al plan gubernamental de
cambiar obligatoriamente los ahorros congelados desde diciembre y ya devaluados
en enero, por papeles del Estado pagaderos recién a cinco y 10 años.
Esta crisis llevó a que el gabinete en pleno presentara
su renuncia, y que Duhalde aceptara la de Jorge Remes Lenicov, el quinto
titular de Economía en un año.
A diferencia de lo que sucedió a finales del año
pasado con Adolfo Rodríguez Saa, también peronista, Duhalde
sí logró la solidaridad de su partido, que parece comprender
que la caída del mandatario esta vez arrastraría a todos.
Sin ningún tipo de ayuda del Fondo Monetario Internacional
(FMI), que se dedicó en los meses pasados a exigir más medidas
recesivas, y con un virtual golpe de la banca extranjera en complicidad
con el Banco Central, cuyo titular Mario Blejer es allegado a los organismos
financieros internacionales, Duhalde podría ahora seguir orientaciones
de economistas locales, como los que elaboraron el Plan Fénix, una
alternativa al FMI
Esta noche comenzaron a circular versiones de que se estudia
establecer algún tipo de ancla al tipo de cambio del peso, o que
se dejaría de lado el plan de los bonos a cambio de los ahorros
que proponía Remes Lenicov, el hombre que impulsó la devaluación
que ya alcanzó casi 70 por ciento.
El mandatario peronista vive la peor crisis desde que
asumió el primero de enero elegido por la Asamblea Legislativa,
luego de la caída de los presidentes Fernando de la Rúa y
Rodríguez Saa en diciembre pasado.
Crisis dentro de la crisis
La primera señal de la nueva crisis dentro de la
crisis se dio la víspera, cuando Duhalde advirtió que dejaría
la presidencia si lo pedía el Congreso, que a su vez no debatió
el plan de convertir en papeles a pagar dentro de 10 años los ahorros
y plazos fijos.
El feriado cambiario y bancario decretado a finales de
la semana pasada llevó la situación aún más
al límite ayer. Entonces, gran cantidad de comercios comenzaron
a rechazar el pago con tarjetas de débito y crédito, mientras
los cajeros se encontraban vacíos.
Finalmente, esta noche se anunció que el Banco
Central ordenó que a partir de mañana se entreguen los haberes
a los jubilados y pensionados, así como los subsidios sociales.
Según allegados al gobierno, Duhalde aceptó
la renuncia del ministro de Economía para evitar mayor tensión
social, y luego del rechazo del Senado a tratar ayer y hoy la llamada ley
Bonex. "No está en los planes de Duhalde renunciar. La crisis es
enorme. No es momento de adelantar elecciones", había dicho luego
un vocero presidencial, cuando dos gobernadores habían llamado a
comicios anticipados.
Después de que grupos de ahorristas hicieron vigilia
desde ayer en el Congreso, senadores y diputados presentaron serios reparos
al proyecto de transformar los ahorros en bonos. Muchos se apostaron alrededor
del Congreso para evitar la salida o entrada de legisladores. Este martes
miles de ahorristas y manifestantes de las asambleas barriales hicieron
un cacerolazo alrededor de la sede del Legislativo.
Pero el Congreso debía tratar no sólo el
plan Bonex con el que la banca extranjera dice que se evitaría un
colapso financiero, sino también un paquete de medidas que incluía
buena parte de los mandatos del Fondo Monetario Internacional (FMI), como
una privatización encubierta de lo que queda de la banca nacional.
Se dice que los bancos estadunidenses tratan en las sombras
de acabar con los europeos, circulando rumores sobre la quiebra de uno
u otro, mientras que millones de pequeños ahorristas comprueban
al paso de los días que la corrupción extendida hizo posible
que la justicia respondiera a los amparos de aquellos que tenían
mayores cifras de dinero incautadas.
Los recursos de amparo tenían un costo y también
los abogados se fijaron comisiones sobre lo rescatado, que iba de 5 hasta
10 por ciento. Eso explica por qué funcionó el amparo para
los más poderosos. La Corte Suprema, elegida mediante dedazo
del gobierno de Carlos Menem, y enfrentada con Duhalde, hizo lo suyo,
tanto como la debilidad del equipo económico del gobierno. A esto
se sumó la acción del canciller Carlos Ruckauf, quien siguiendo
la línea de "relaciones carnales" con Estados Unidos que inauguró
su compañero partidario Menem, no sólo embistió contra
Cuba, sino que también incluyó el tema de Colombia en la
agenda.
Hoy Menem salió al ruedo nuevamente apoyando el
plan Bonex como una salida al "error" de haber salido de la paridad cambiaria
?que era insostenible?, al tiempo que se dijo estar "siempre listo" para
apoyar a Duhalde, su enemigo partidario.
Mientras, el FMI no tuvo hoy reacción a los acontecimientos
en Argentina, pero desde Estados Unidos un reconocido economista de la
firma de inversiones BCP Securities emitió un duro diagnóstico:
ese organismo financiero no va a ayudar a Argentina porque "es un país
que no tiene importancia geoestratégica para Estados Unidos", y
en cambio destinará dinero a Turquía y otros.
Y por eso, el FMI, al que Walter Molano definió
como un organismo del grupo de los siete países más poderosos
que busca hacer negocios y no fomentar el desarrollo, "pide acciones que
no se pueden cumplir". Incluso Molano lamentó que Remes Lenicov
no se hubiera dado cuenta de que el FMI no tiene interés en Argentina,
su otrora alumno aplicado.
Por lo pronto, la empresa argentina Industria Metalúrgica
Plástica denunció en un documento que luego se entregará
a la justicia, al gobierno de Estados Unidos y al FMI por extorsión
sobre el país para lograr el dictado de leyes "que llevarán
a un mayor caos social", como los despidos de decenas de miles de personas
en el interior del país y la anulación una ley contra delitos
económicos.
En este contexto, al menos asomó algo parecido
a una buena noticia: Los trabajadores de la empresa de electrodomésticos
Siam, alguna vez proveedora de muchos hogares argentinos y luego en la
quiebra, cuando se permitió la avalancha de productos importados,
la pusieron a funcionar nuevamente, luego de haberla mantenido contra todos
los pronósticos como una cooperativa.