Se reunirán en el Vaticano la semana próxima
Buscan clérigos de EU solución al escándalo por la pederastia
Discutirán, entre otras, norma que separa pecado de delito
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Ciudad del Vaticano, 9 de abril. Los jerarcas de la Iglesia católica de Estados Unidos buscarán la guía del Vaticano la semana próxima para decidir si los sacerdotes culpables de abusos contra menores pueden continuar con su ministerio o si una sola falta es suficiente para suspenderlos, dijo el viernes una fuente eclesiástica.
Para los clérigos es muy importante esa reunión, ya que buscarán una estrategia conjunta que los ayude a restablecer la credibilidad de los fieles, tras el escándalo por la pederastia que sacudió a la Iglesia católica en ese país.
Entre otros temas, los líderes eclesiásticos discutirán en qué momento deben ser entregados a las autoridades civiles los sacerdotes acusados de pederastia.
"Una razón por la que los líderes quieren resolver este tema es que nunca se habían enfrentado a nada parecido", dijo Francis Maniscalco, portavoz de la Conferencia Episcopal Católica de Estados Unidos.
El escándalo estalló en Boston, tras ser acusado el cardenal Bernard Law de haber cambiado de una parroquia a otra a los sacerdotes que se sabía eran culpables de pederastia, en lugar de despedirlos del seno de la Iglesia tras fallidas curas siquiátricas.
"Esta crisis pone en tela de juicio no sólo la moralidad de los sacerdotes, sino la integridad de la jerarquía. Y los obispos y cardenales de Estados Unidos quieren enfrentar la crisis y resolverla", dijo Maniscalco a periodistas en el Vaticano.
Maniscalco dijo que los jerarcas examinarán la norma que dicta que una sola falta es suficiente para suspenderlos de su ministerio o si hay excepciones para que un sacerdote pederasta pueda continuar haciendo su trabajo en lugares como casas de ancianos.
Los 13 cardenales estadunidenses, incluyendo los tres que trabajan en el Vaticano, fueron convocados a la reunión.
ƑPecado o delito?
Dónde termina el confesionario y dónde comienza la Corte es uno de los temas que van a discutir los cardenales cuando se reúnan en el Vaticano la próxima semana, en busca de un consenso que los ayude a enfrentar el escándalo por la pederastia que cimbró a la Iglesia católica estadunidense.
"La teología moral cristiana reconoce que hay comportamientos adictivos y que darles la absolución tras una confesión no va a curar a esas personas", dijo el padre Thomas Reese, un jesuita estudioso de la historia de la Iglesia católica.
En una carta este mes en la que el cardenal de Boston dijo que no renunciaría tras las denuncias de abusos sexuales de sacerdotes contra menores de edad en su diócesis, Law dijo que las dimensiones del problema eran morales, patológicas y delictivas.
El escándalo de Boston desató revelaciones sobre otros casos de pederastia en otras diócesis de Estados Unidos.
En una carta, Law, jerarca de la cuarta diócesis católica más grande de Estados Unidos, admitió que él y otros obispos de su país "no habían tomado suficientemente en cuenta el lado criminal que conlleva el abuso sexual contra menores de edad".
George Weigel, teólogo católico, autor de la biografía papal Witness to Hope (Testigo de la esperanza), publicada en 1999, dijo que la línea para decidir cuándo un pecado se convierte en un delito debió haber sido trazada hace mucho tiempo.
"Hubo un tiempo en la historia de la Iglesia en que la gravedad de algunos actos era tal que descalificaba a una persona para seguir ejerciendo su ministerio aunque ésta se mostrara arrepentida. Debemos rescatar ese tiempo", dijo.
"Los obispos son antes que nada pastores, no son adjuntos de la fiscalía, pero lo que ha quedado muy claro con los casos de pederastia es que la sociedad tiene razón al exigir que haya más seguridad para sus menores", agregó.