Informe 2002 de Social Watch, que analiza el impacto de la globalización en el mundo
Relega la administración foxista el desarrollo social; privilegia a bancos
Señala el organismo que el pago de la deuda externa es una prioridad del gobierno mexicano
La red destaca el grave rezago y la desigualdad entre etnias y regiones que existen en el país
ROBERTO GONZALEZ AMADOR
A más de un año de haber iniciado, el gobierno del presidente Vicente Fox Quesada ha dejado la atención al desarrollo social en un segundo plano para privilegiar financieramente el pago del rescate bancario emprendido por la administración anterior y atender las obligaciones de una creciente deuda pública, consideró la red de observación ciudadana internacional Social Watch.
"Mientras el desarrollo social no es prioridad del gobierno de Vicente Fox, el pago de la deuda pública y el rescate bancario están asegurados", señaló Social Watch en su informe 2002, dedicado a analizar el impacto social de la globalización en el mundo.
El reporte estableció que el actual gobierno, el primero de oposición después de más de 70 años de administraciones priístas, reconoce el grave rezago y la desigualdad social existente entre etnias y regiones en México, pero el Ejecutivo esgrime la insuficiencia de recursos para impulsar y fortalecer los programas sociales destinados a atender las necesidades más apremiantes del país en materia de abatimiento de la pobreza, nutrición, educación, vivienda, salud, desarrollo rural, infraestructura y justicia.
Social Watch desconfía de las afirmaciones gubernamentales de que aumentar los ingresos públicos tenga como objetivo elevar el gasto en áreas de impacto social. La red de observación ciudadana señaló, en cambio, que la intención gubernamental de contar con más recursos fiscales es "lograr a toda costa un menor nivel de endeudamiento público, como exigen las instituciones financieras internacionales en sus políticas de ajuste estructural que se han aplicado en México desde hace dos décadas y que han contribuido a empeorar las condiciones de vida de millones de mexicanos.
Según Social Watch, la deuda externa de los sectores público y privados nacionales alcanza un monto equivalente a 47 por ciento del producto interno bruto (PIB), unos 270 mil millones de dólares.
El grupo no gubernamental aseguró, citando estudios de expertos universitarios, que las "instituciones financieras internacionales ya proyectaron prácticamente el programa para todo el sexenio del presidente Fox, siendo la prioridad de la política económica el pago de la deuda pública".
Social Watch asegura que el gasto para desarrollo social y humano, calculado para este año en 592 mil 91 millones de pesos, representa una reducción en términos reales para renglones específicos del área social de hasta 10 por ciento en comparación con el ejercido un año antes.
"Las mayores transferencias del presupuesto en 2002 están en el rescate bancario, que requerirá 0.7 por ciento del PIB en este año y una décima de punto porcentual cada ejercicio a partir de 2003, proyección incluso validada por el Fondo Monetario Internacional", estableció.
En cuanto a otro aspecto social, señaló que la educación, considerada el eje de la política de desarrollo humano del gobierno de Fox, según el Plan Nacional de Desarrollo 2001-2006, también es castigada en cuanto a asignación de recursos para favorecer obligaciones financieras.
"El gobierno prevé gastar en educación superior para todo el sexenio 50 mil millones de pesos, mientras que al rescate bancario se le aplican 70 mil millones de pesos en tan sólo dos años", indicó.