En el primer tiempo ambas escuadras exageraron en las precauciones

Rayados rompió su mala racha; ganó 1-0 a Pachuca

Los Tuzos sumaron su tercera derrota consecutiva; no conocen la victoria desde la fecha 10

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Monterrey, 23 de marzo. El equipo Monterrey regresó al triunfo, luego de superar 1-0 al Pachuca, en encuentro de la fecha 13 del Torneo de Verano, para cortar una racha de cuatro derrotas consecutivas, mientras Tuzos sumó tres reveses al hilo.

El delantero Antonio de Nigris hizo al minuto 48 la solitaria anotación del triunfo para dar tranquilidad al conjunto rayado que no ganaba desde la fecha ocho, cuando se impuso 3-2 a Tecos de la Universidad Autónoma de Guadalajara (UAG).

Después de esa victoria, Rayados de Monterrey perdió 2-3 ante Santos, 2-0 con Atlante, 0-3 ante Morelia y 2-4 frente América. A su vez, el campeón Tuzos de Pachuca ganó por última vez en la fecha diez por 2-1 a León y después cayó 0-3 con Necaxa y 1-2 ante Toluca.

Monterrey llegó a 17 puntos en el tercer lugar del grupo Uno, en el que figura con cinco victorias, dos empates y seis derrotas. Pachuca se quedó tercero con 17 unidades en el sector cuatro, luego de cinco victorias, dos igualadas y cinco caídas.

Fue un partido evidentemente entre equipos perdedores, lo que significó un primer tiempo plagado de precauciones, aunque con cierto interés por ambos bandos por anotar el gol de la diferencia.
Con el inicio del segundo tiempo, Rayados se arrojó en busca del triunfo, con mejor coordinación de líneas y ánimo, hasta abrir el marcador al minuto 48.
Jesús Arellano explotó su habilidad por banda derecha, donde se quitó un defensa y envió centro pasado para un Antonio de Nigris que entró agachándose para impactar con la cabeza el balón para el 1-0.
Después De Nigris se convirtió en enemigo del gol, pues dos disparos francos a la portería los envió por arriba y un remate de cabeza, también con opción de gol, lo dirigió muy por encima del travesaño.

A partir del minuto 75 ejerció presión a la ofensiva el conjunto visitante, aunque se topó con una defensiva que rechazó todo, además de que Sergio Santana fue extremadamente cuidado y por consiguiente anulado.

El árbitro fue Gilberto Alcalá, quien dirigió el partido sin dificultades.