Martes 19 de marzo de
2002 |
La reforma a la LFT |
En la actualidad
está en curso una nueva ofensiva de los organismos
empresariales, que en esta ocasión buscan modificar la
Ley Federal del Trabajo (LFT) únicamente con base en sus
planteamientos. Ayer, el presidente nacional de la
Confederación Patronal de la República Mexicana
(Coparmex), Jorge Espina Reyes, tras reunirse con
diputados locales del PRI, dio a conocer que uno de los
propósitos que se busca con esta reforma es aumentar las
jornadas laborales en las empresas. Esta reforma hasta ahora únicamente es impulsada por los organismos empresariales y por el partido en el gobierno federal, es decir el PAN, que al mismo tiempo coincide con los planteamientos de las cúpulas de sector privado. De lo poco que se conoce de sus propuestas, todo indica que los cambios que quieren hacer a la LFT buscan reducir prestaciones laborales y no mejorarlas. Es lamentable que en esta discusión ni los sindicatos ni los académicos han podido hacer un contrapeso al proyecto de Coparmex y otras agrupaciones de los dueños de los capitales, ni presentar un proyecto alternativo que permita mejorar las condiciones laborales de la clase trabajadora del país. Una expresión de la falta de dinamismo de los sindicatos, tanto de los llamados independientes como los del sector oficial, se observa en la empresa Volkswagen, en donde los trabajadores están decidiendo -mediante un referéndum- reducir sus salarios o bien el número de obreros que laboran en esta planta, ante la ausencia de una organización sindical que impulse una lucha para evitar medidas que los afecten. |