Martes 19 de marzo de
2002 |
n Se puede pedir ayuda a la Secretaría de Economía federal, manifestó el gobernador |
De ocurrir despidos en Volkswagen, el gobierno estatal crearía un programa de empleo temporal: Morales Flores |
q Reconoció retraso en la reubicación en Acatzingo; se privilegiará el diálogo, dijo |
Jorge Machuca Luna n |
De ocurrir el
despido de más de mil 300 obreros de Volkswagen de
México, el gobierno estatal pondrá en marcha un
programa emergente de empleo temporal por el que se
buscará ingresar en otras empresas a quienes
eventualmente pudieran ser dados de baja de la fábrica
alemana de vehículos. Lo anterior fue dado a conocer por el gobernador Melquiades Morales Flores, quien en una entrevista agregó que de ponerse en marcha el citado programa, solicitará ayuda al gobierno federal por medio de la Secretaría de Economía. Sostuvo que ambas instancias serían las encargadas de diseñar la forma de ayudar a los obreros que se quedaran sin empleo. Al referirse a la consulta que lleva a cabo el sindicato de la fábrica de capital europeo, Morales insistió en que "lo más importante es mantener vigente la planta productiva, que no se vaya a perder por incomprensión del sindicato". Añadió que tampoco sería correcto que con el afán de no afectar económicamente a la citada empresa, se atente contra los derechos de los trabajadores; "hay que buscar el justo medio entre los dos factores de la producción", dijo. Reconoció que los problemas en Volkswagen son evidencia de que aún no ha llegado la recuperación económica que se había vaticinado para el presente trimestre; Melquiades Morales pronosticó que una posible recuperación económica podría empezar a notarse hasta el próximo trimestre. El problema de la falta de mercado para los vehículos es mundial, y en particular los problemas de ese tipo en la entidad no pueden ser resueltos por el gobierno; empero, "haremos lo que nos toca para tratar de paliar en parte éste problema". Por otra parte, al referirse a petición de éste diario al problema que se vive en Acatzingo, municipio que fue afectado por un derrame petrolero en enero, hecho por el que 30 familias serán reubicadas, el mandatario aceptó que existe un retraso en la compra de un terreno y la edificación de las viviendas que los damnificados ocuparán. "No tan fácilmente se construye viviendas de un día para otro, a veces nos llevamos un año"; aclaró que sí están disponibles los recursos económicos que Pemex ofreció para la construcción de viviendas; sin embargo, "no es tan fácil cambiar a la gente de lugar (de residencia)", y recordó que de manera similar tampoco se ha logrado reubicar a todos los habitantes de la zona de riesgo del Popocatépetl. Reiteró por último que para mover a las personas de sus lugares de origen, es preferible hacerlo utilizando el diálogo y no a través de imposiciones gubernamentales. |