Recurren a talkshows y reality shows para atraer audiencia, sin conseguirlo
Bajos ratings obligan a Televisa y Tv Azteca a degradar contenidos de sus programas
Noticiarios, programas cómicos y telenovelas no logran despertar el interés del público
Los productos más aceptados son las películas, ajenas a la producción cotidiana de las televisoras
JENARO VILLAMIL
En menos de dos años, los principales programas de Televisa y Tv Azteca han enfrentado severa caída de rating. El verdadero Big Brother que vigila los contenidos y el futuro de las dos principales cadenas de televisión abierta son la constante presión por la baja o alza de las audiencias y las ventas de espacios publicitarios y de informerciales que constituyen un auténtico boom en la televisión abierta.
La lucha y el descenso del rating, de acuerdo al telerreporte mensual por programa elaborado por IBOPE, revela cosas sintomáticas: mientras más cae el índice de audiencias, peores son los contenidos de los programas tanto en Televisa como en TV Azteca, incluyendo a los segmentos informativos que han disminuido en 2002 en comparación con 2000. La idea original de que la "competencia comercial" mejoraría la televisión mexicana no se sustenta si comparamos los altos índices de programas como Cero en conducta, que tiene diez veces más audiencia que Zona abierta y ambos se transmiten en Canal 2, o la caída acelerada de la audiencia ante los segmentos informativos de ambas televisoras. Noticiero con Joaquín López Dóriga, el estelar de Canal 2, pasó de 6.5 por ciento a 5.8 por ciento entre enero y febrero de 2002. Ese mismo segmento, en enero de 2000, tuvo un promedio de 7.6. Hechos, de Canal 13, no está mejor: pasó de 2.6 a 2.1 entre enero y febrero de 2002.
Para revertir esta crisis, Televisa compró dos reality shows y planea lanzar próximamente el programa de concurso ƑQuiere ser usted millonario? que, al igual que muchos otros contenidos televisivos, va en contra de la regulación que establece la Ley Federal de Radio y Televisión, ya que no se precisa una intervención eficaz de la Secretaría de Gobernación en la selección de los concursantes y en la entrega de los premios.
Este programa fue adquirido desde diciembre de 2001 por Televisa a la cadena estadunidense ABC. Se planea que esté al aire para mayo de este año y, de acuerdo con declaraciones del productor André Barrén, es un programa de concurso que entregará un premio de 5 millones de pesos. En otros países ha sido también duramente criticado por constituir "telebasura".
En España, el presentador de este mismo programa Carlos Sobera, sostiene que el secreto del concurso, basado en el clásico modelo de preguntas y respuestas, radica no tanto en su formato como en su puesta en escena. "Todo está pensado milimétricamente. La música, la luz, el escenario circular, la fórmula de una pregunta con pocas respuestas posibles, los tres comodines... todo está subordinado a crear una atmósfera de tensión", describe Sobera. ƑQuiere usted ser millonario? se transmite en 42 países. En Suecia, el programa dejó de emitirse en 1999 por varios meses, mientras un juzgado verificaba si se ajustaba a las leyes nacionales sobre juegos y sorteos.
Para no quedarse atrás de Big Brother, Tv Azteca estrenó desde febrero de este año el programa Sexos en guerra, de muy mala factura y franca chabacanería sexista que registró un índice de 5 por ciento de rating, mayor que Ventaneando (3.5 por ciento) y que Tómbola (2.1). En Televisa, el avance del programa especial sobre Big Brother tuvo 5.1 por ciento, en enero de 2002, y en febrero subió a 6.2 por ciento. Es previsible que rebase en marzo 10 por ciento del universo de rating.
Sin embargo, a estos programas les puede suceder lo que ya les ha ocurrido a los talk shows y a muchos programas cómicos: después de la novedad y ante la baja calidad, decaen en el gusto de la audiencia. Las dosis de morbo y de sensacionalismo tienen que aumentar. Por ejemplo, el programa Cosas de la vida, de Canal 13, tuvo en enero de 2000 un promedio de 3 por ciento, pero en enero de 2002 registró 2.8 y para febrero disminuyó a 2.7 por ciento. Laura en América, transmitido en Canal 9 de Televisa, tuvo 2.4 por ciento en enero de 2002 y bajó a 2.8 en febrero de 2002.
Cero en conducta, caída de rating
El caso más dramático de las trampas del rating es el programa Cero en conducta, de Canal 2, que alcanzó el más alto nivel de audiencia en enero y febrero de 2000, mucho más que las telenovelas y que, por supuesto, los noticiarios. En el primer mes registró 16.6 y después 16.3 por ciento. Todavía en diciembre de 2000 este mismo programa se mantenía alto: 10.2 por ciento. Sin embargo, para enero de 2002 su rating se desplomó hasta 7.4 y para febrero se ubicó en 6.2 por ciento.
Como parte del mismo fenómeno, Güereja de mi vida, de Canal 2, tuvo 6.5 por ciento en enero de 2002 y para febrero tuvo un ligero descenso a 6.1 por ciento. Gente con chispa, de Canal 13, registró 4.4 por ciento en enero de 2002 y en febrero bajó a 3.7 por ciento. La hora pico, de Canal 2, tuvo 7.3 por ciento en enero de 2002 y en febrero bajó a 6.2 por ciento. Curiosamente, se incrementó Lo mejor de Furcio: pasó de 5.8 por ciento en enero a 6.2 en febrero.
El gran fracaso de rating y entretenimiento para Tv Azteca son los programas Ya llegó Mayito, que registró apenas 1.3 por ciento en enero del 2002 y en febrero bajó ligeramente a 1.2 por ciento -para luego salir del aire-, y Puro Loco, que registró 1.4 y 1.6 por ciento en enero y febrero de este año. El programa que incrementó su índice de audiencia fue Picante y caliente, de Canal 7, que pasó de 4.3 por ciento en enero de 2002 a 5.6 en febrero.
Las telenovelas siguen constituyendo, con mucho, los productos con más alto rating. En este terreno, Televisa parecería haber recuperado terreno frente a la competencia que le planteó al inicio Tv Azteca. El Manantial en enero de 2002 alcanzó 12.2 por ciento y en febrero fue de los pocos programas que incrementó hasta 14.9 por ciento, el rating más alto de Televisa. Salomé tuvo 10.9 por ciento en enero y en febrero subió a 11.9 por ciento. La telenovela colombiana Yo soy Betty la fea tuvo 3.8 por ciento en enero de 2002 y para febrero bajó ligeramente a 3.5 por ciento, índice elevado si tomamos en cuenta el horario (15 hrs).
Las que han disminuido son las telenovelas de Canal 13. Agua y Aceite, abruptamente suspendida de la pantalla, registró 4.1 por ciento en enero de 2002 y en febrero tuvo 3.3 por ciento. Cuando seas mía tuvo 7.7 por ciento en enero y bajó a 7 por ciento en febrero. Es el programa con más alto índice de TV Azteca.
Noticiarios a la baja
Una de las tres funciones esenciales de la televisión es informar. Sin embargo, los índices de audiencia revelan que los noticiarios, alguna vez los productos principales de la pantalla chica, están muy lejos de competir con las telenovelas y hasta con El chavo del ocho.
En Televisa, el noticiero conducido por Joaquín López Dóriga pasó en enero de 2002 de 6.5 por ciento a 5.8 por ciento, uno de los niveles más bajos. La hora pico, programa cómico, tuvo más rating: 7.3. Paradójicamente, aumentó el noticiero con Dolores Ayala que pasó de 4 por ciento en enero de 2002 a 4.2 en febrero de este año. Visión AM, de Canal 4, se mantuvo en los dos primeros meses de este año en 1 punto. El segmento de Leonardo Kurchenko pasó de 2 por ciento a 1.6 por ciento.
En Tv Azteca, Hechos de Canal 7 se mantiene como el más alto de todos los segmentos: registró 3.6 por ciento en enero de 2002 y 3.5 por ciento en febrero del mismo año. En contraste, la emisión de Canal 13 bajó de 2.6 a 2.1 por ciento. El programa informativo Reporte 13, con Ricardo Rocha, tuvo 0.9 por ciento en enero de 2002 y se elevó ligeramente a 1.1 en febrero. Mantiene el mismo índice que Círculo rojo, de Televisa. Sin embargo, Zona abierta, que alcanzó en enero de 2000 un índice de 1.5 por ciento bajó en enero de 2002 a 0.6 por ciento. Este porcentaje lo mantiene en febrero.
El Mañanero, la adquisición estelar de Televisa al inicio de este año, no ha creado un fenómeno de rating a nivel nacional, ya que se transmite en el Canal 4, pero su promedio, según el registro de Ibope, es de 0.9 por ciento en los dos primeros meses.
Por otro lado, los productos televisivos que siguen manteniendo un alto nivel son, paradójicamente, las películas, es decir, lo que no forma parte de la producción cotidiana de las dos grandes cadenas comerciales. El Canal 5, de Televisa, mantuvo un porcentaje promedio de 5.5 por ciento de audiencia gracias a películas como Contacto sangriento, Día de la Independencia, El quinto elemento, Sin dejar rastro, Terror bajo tierra y Jurassic Park, transmitidas en enero de 2002. Como se ve, todas son películas de producción estadunidense y comercial. En febrero de 2002, las tres partes de Rambo obtuvieron 6.2, 6.3 y 7.3 por ciento de rating, y la transmisión que batió récords fue Tornado, con 8.2 por ciento.
Y bajo los dictados implacables del rating hasta la transmisión de los partidos de la selección nacional y los programas de corte deportivo han registrado disminución de audiencia. El partido contra Corea del Sur, en enero del 2002, tuvo 7.3 por ciento, pero en febrero, el partido contra Yugoslavia bajó a 3.3 por ciento. El programa estrella de Tv Azteca, Deportv, pasó de 1.5 a 1.6 por ciento entre enero y febrero de 2002. Acción, de Canal 2, pasó de 4.6 a 4.7 por ciento de rating en el mismo periodo.