MEXICO-CUBA
El presidente cubano saludó a peloteros y al propietario del equipo mexicano
Asistió Castro al juego Industriales-Diablos
El embajador Ricardo Pascoe y personal de la sede diplomática estuvieron en el estadio
GERARDO ARREOLA CORRESPONSAL
La Habana, 6 de marzo. El presidente cubano, Fidel Castro, asistió esta noche al estadio Latinoamericano para presenciar el encuentro de beisbol en el que Industriales de La Habana impuso la tercera derrota consecutiva a Diablos Rojos del México durante su gira por la isla.
Una aguerrida porra de jóvenes mexicanos que estudian medicina y educación física en la isla animó infructuosamente al equipo visitante. El México perdió por 7-3. Los dos días anteriores había caído ante Pinar del Río (6-4) y Matanzas (5-2).
Castro llegó al estadio a las ocho de la noche en punto. En el palco principal estuvo flanqueado por el canciller, Felipe Pérez Roque, y el presidente del Instituto Nacional del Deporte y la Recreación de la isla, Humberto Rodríguez.
Antes de iniciarse el encuentro, Felipe Pérez Roque saludó al embajador mexicano, Ricardo Pascoe, quien también presenció el partido en un palco a unos 20 metros de la tribuna principal, acompañado de los funcionarios y el personal en pleno de la sede diplomática.
Castro habló largamente con Pérez Roque. Al iniciarse la quinta entrada interrumpió la charla, hizo unas notas en un cuaderno que apoyaba en las rodillas y habló por un celular. Luego se levantó para bajar a los dogout a saludar brevemente a los equipos.
Con los Diablos Rojos firmó pelotas, se caló una gorra de la novena mexicana y posó para fotos. Ahí saludó al dueño del equipo, el empresario Alfredo Harp Helú. Se fue después de visitar a los Industriales. Eran las 10 y cuarto de la noche y el juego estaba interrumpido a su exacta mitad.