Candidatos al Congreso aumentan dispositivos de seguridad

Acto de barbarie, el asesinato de legisladora, dice Pastrana

El presidente colombiano llama a participar en las elecciones

AFP, REUTERS Y DPA

Santafe de Bogota, 4 de marzo. El asesinato de la congresista Martha Daniels, calificado hoy por el presidente Andrés Pastrana de "acto de barbarie", ensombreció aún más la campaña para las legislativas colombianas del próximo domingo, ya amenazadas por el clima de violencia tras el rompimiento del diálogo de paz con las guerrilleras FARC.

El crimen de la senadora -cuyo nombre fue vinculado reiteradamente a escándalos relacionados con la corrupción- y de otras dos personas que la acompañaban fue atribuido inicialmente por la policía a un frente de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), pero la fiscalía general aclaró que estudia hipótesis que podrían señalar a delincuentes comunes como autores.

Los cuerpos de Daniels y su acompañantes fueron abandonados en un sitio de la localidad de Zipacón, donde hace una década aparecían cadáveres de personas baleadas por narcotraficantes rivales, según las autoridades. Fuentes parlamentarias descartaron a su vez que Daniels, del opositor Partido Liberal, hubiera sido atacada por orden de adversarios políticos o por que el crimen hubiera tenido relación con su actividad de legisladora.

Daniels fue una de las principales defensoras del ex presidente Ernesto Samper, cuando fue procesado en 1996 por el ingreso de dinero del narcotráfico a su campaña, y su esposo se encuentra detenido tras haber sido acusado de uno de los mayores casos de corrupción en Colombia, por el proceso de privatización de puertos en los noventa.

Pero independientemente de quiénes fueron los autores y cuáles los móviles del asesinato del sábado, aumenta en el país la zozobra en relación con el proceso electoral. ''No se trata de pedir que se suspendan los comicios, sino de que el gobierno tome medidas para salvar lo poco que queda de democracia", dijo este lunes el candidato presidencial liberal, Horacio Serpa, segundo lugar en los sondeos para los comicios de mayo.

Esta misma inquietud fue compartida por la totalidad de los candidatos presidenciales, que se sienten más vulnerables desde el 20 de febrero, cuando Pastrana rompió las negociaciones de paz luego que las FARC secuestraran a un legislador opositor. Esa guerrilla tiene ya como rehenes a seis legisladores, entre ellos la candidata presidencial Ingrid Betancourt.

Ante la situación, muchos de los cerca de 10 mil candidatos para el Senado o la Cámara de Representantes optaron por realizar sólo actos en sitios cerrados o por conducto de medios de comunicación, mientras otros evitan los viajes en carretera y se desplazan en helicóptero.

Por su parte, la policía anunció que 100 mil de sus hombres intervendrán en el plan de seguridad para las legislativas, mientras Pastrana repudió el asesinato de Daniels y exhortó a los colombianos a participar en estas elecciones en señal de protesta contra la violencia. "Seguimos haciendo todo lo que esté a nuestro alcance para preservar, como lo hemos hecho hasta el día de hoy, las garantías electorales", aseguró el mandatario conservador.

La guerrilla tradicionalmente no ha saboteado las elecciones nacionales, pero ejerce fuertes presiones sobre los electores en sus zonas de influencias, mientras los paramilitares de extrema derecha han admitido tener aspirantes e inclusive han señalado que buscan que la tercer parte del nuevo Congreso esté integrada por afines.

Recientes encuestas señalan que los candidatos de los tradicionales partidos Conservador y Liberal estarían cerca de sufrir una derrota histórica en las presidenciales de mayo a manos del aspirante Alvaro Uribe, quien ha sido vinculado con los paramilitares y un partidario de la mano dura.

El 80 por ciento de los colombianos, por su parte, apoya la decisión de Pastrana de romper el diálogo de paz con las FARC, mientras 51 por ciento cree que el conflicto armado no concluirá en los próximos cinco años, según una encuesta publicada este lunes por la revista Semana.