Ť Sigue la búsqueda de cinco cuerpos en La Espuela

Afloran irregularidades laborales en la contratación de mineros en Coahuila

ANTONIO PEREZ CORRESPONSAL

Saltillo, Coah., 30 de enero. La tragedia ocurrida hace una semana en el pozo carbonero La Espuela, en la comunidad Minas de Barroterán, municipio de Múzquiz, propició que afloraran irregularidades en cuanto a garantías y derechos de los trabajadores mineros de la región.

Los deudos de los 12 trabajadores que hace cuatro meses murieron en un accidente de trabajo en el pozo La Morita, de San Juan de Sabinas, fueron indemnizados con cantidades inferiores a sus percepciones. No obstante que presentaron una denuncia de hechos desde octubre pasado, ante la subdelegación administrativa del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), al momento no han obtenido respuesta.

El IMSS entregó indemnizaciones de 48 mil pesos por cada trabajador muerto y pensiones de mil 300 pesos mensuales, porque Miguel Valdez Ramos, dueño del pozo La Morita, los tenía inscritos con un sueldo de 40 pesos diarios, cuando en realidad ganaban entre 120 y 150 pesos, por lo que las compensaciones entregadas quedaron debajo de lo que marca la ley, dijo el abogado Rogelio Gerardo Olivares Escobedo, representante de los familiares de las víctimas.

El coordinador de la Comisión de Trabajo del Congreso estatal, Sergio Félix Landeros, aseguró por su parte que los 13 mineros que hace una semana perecieron en La Espuela no estaban dados de alta ante el IMSS, lo que contraviene la aseveración que emitió el instituto el viernes anterior en cuanto a que los patrones sí cumplieron con tal obligación.

Este miércoles, la delegación del IMSS rectificó e indaga en sus archivos la inscripción de los mineros en su padrón. Puntualizó que César de la Garza Herrera, dueño de La Espuela, está dado de alta como patrón y se ha encontrado como afiliados a nueve de los 13 mineros fallecidos, situación en la que estarían los otros cinco muertos que aún falta por rescatar del pozo. Además, el IMSS acotó que independientemente de las circunstancias actualmente apoya a los deudos con los gastos funerarios.

Mientras tanto, en el lugar del siniestro prosiguió la búsqueda de los cinco cadáveres todavía no rescatados. En las labores participan dos perros amaestrados de Querétaro, mineros y agentes de diversos cuerpos policiacos y de Protección Civil, así como brigadistas particulares.

El obispo de la diócesis de Saltillo, Raúl Vera López, oficiará este jueves una misa en la parroquia de Minas de Barroterán, justo cuando se cumple un siglo de la primera tragedia en la región: la explosión en la mina El Hondo, que dejó un saldo de 200 mineros muertos.

Ofrece becas la administración estatal

Mientras, el gobierno del estado, a través del secretario de Educación Pública, Humberto Moreira Valdés, firmó un convenio con el alcalde de Múzquiz, Hugo Martínez, en el que se comprometió a otorgar becas a los hijos de los mineros muertos para que puedan cursar sus estudios desde prescolar hasta licenciatura. Como garantía del compromiso, en los próximos días se entregará una cédula notariada a los familiares de las víctimas.