Ť Ofrece una conferencia magistral en San Salvador

Monsiváis: la llegada de mujeres a los puestos de dirección, signo de tolerancia

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San Salvador, 30 de enero. Basado en una escueta revisión histórica, el escritor mexicano Carlos Monsiváis tejió conceptos del significado de la identidad y la tolerancia, durante una conferencia magistral ofrecida en El Salvador.

En el marco del séptimo Festival por la Paz, que celebra este país a diez años de finalizada una guerra interna, Monsiváis configuró lo que podrían ser la identidad y la tolerancia vistas desde la experiencia mexicana.

La independencia en 1810 es, a su juicio, el momento cuando ya se contaba con un acervo de identidad arraigado entre la población como la historia, las tradiciones, las costumbres, los símbolos patrios y la Virgen de Guadalupe.

En el Museo Nacional David J. Guzmán de la capital salvadoreña, el autor de más de 40 libros señaló que durante las guerras de Reforma y de Intervención, en el siglo XIX, se les da por vez primera entrada al término de tolerancia y a la libertad de credo.

"En la misma tónica se da curso legal a otra tolerancia, que es el divorcio, porque la tolerancia es la convivencia, la intolerancia es la separación, y eso es un avance histórico", señaló Monsiváis ante unas 200 personas.

La Revolución Mexicana trae consigo una novedad histórica: la existencia de los campesinos, que hasta ese momento habían sido considerados parte del inventario olvidable de la nación.

La presunta identidad mexicana también fue marcada, según el escritor, por la imagen que se propagó con los ídolos del cine mexicano, como Jorge Negrete o Pedro Infante, quienes formaron un estereotipo de hombres machistas, vulnerables o invulnerables.

Sobre tolerancia destacó las transformaciones constitucionales a lo largo de la historia que llevó a la libertad de culto, el reconocimiento de la cultura indígena, el voto de las mujeres, el derecho al divorcio.

La tolerancia siempre es un concepto definido, por un lado, por las circunstancias, y por otro, por los derechos, reflexionó Monsiváis, al afirmar que es un elemento que depende en lo básico del entendimiento de las leyes y la necesidad de ampliarlas.

Agregó que se trata de un proceso de comprensión de los derechos ajenos y, según su juicio, no tiene mayor aplicación fuera de la política.

En México "vivimos un drama en Ciudad Juárez con un asesino o grupo de asesinos seriales que hasta el momento llegan a 215 víctimas mujeres, sin que haya una posibilidad de detenerlos y sólo se haya probado el asesinato con responsabilidades en cuatro o cinco casos".

Monsiváis recordó que un funcionario de la Procuraduría de Justicia del estado mexicano de Chihuahua dijo que "eso les pasa por andar provocando a los hombres".

"Una estupidez de ese tipo fue recibida inmediatamente con críticas. Otro cardenal de Guadalajara dijo que las violaciones se deben a que las mujeres usan minifaldas, y estos ejemplos tienen que ver con un clima que se crea", mencionó.

Planteó que entre México y El Salvador existen similitudes, pero advirtió que no pretendía equiparar situaciones, porque una guerra (como fue la salvadoreña) "es una situación límite que da origen a una realidad emocional muchísimo más profunda que las que aquí he descrito".

"La idea de tolerancia tiene que ver, creo, con la necesidad del perdón para el desarrollo social y gubernamental y con la imposibilidad del olvido para tener en la memoria aquello que no debe repetirse", externó.

Un signo de la tolerancia que hoy vive México es la llegada de las mujeres a los puestos de dirección y el mismo hecho de terminar con el prejuicio de la superioridad masculina, expresó Monsiváis, quien concluyó este miércoles su visita a El Salvador.