Ť Aparecían en un borrador y fueron omitidos del mensaje

Migración y México, temas ausentes del informe del mandatario de EU

JIM CASON Y DAVID BROOKS CORRESPONSALES

Washington y Nueva York, 30 de enero. Los inmigrantes y la relación con México aparecían en uno de los borradores del informe presidencial a la nación, pero el presidente George W. Bush no los incluyó en su versión final del discurso que presentó la noche del martes, ante una sesión conjunta del Congreso.

''Fue muy notable que no hubiera ni un solo suspiro sobre un tema que no sólo dominaba la agenda antes del 11 de septiembre, sino que tanto el presidente como su secretario de Estado siguieron asegurando a los funcionarios mexicanos se mantenía como asunto prioritario'', comentó el especialista en políticas de migración, Demetrios Papademetriou, del Migration Policy Institute, en entrevista con La Jornada.

El contraste es marcado. Cuando Bush ofreció su primer discurso ante el Congreso, en febrero del año pasado, habló de la vida de la maestra de español Josefina Ramos y hasta utilizó un frase en castellano. A finales de septiembre del año pasado, cuando se presentó nuevamente en una sesión conjunta del Congreso para hablar de la guerra contra el ''terrorismo'', hizo referencia a la importancia de la relación bilateral con México.

Funcionarios de la Casa Blanca habían solicitado a un asesor redactar un texto sobre la importancia de las relaciones con México y Canadá, para incluirlo en su informe presidencial, pero esa sección fue cortada de la versión final, explicó una fuente confiable. Un funcionario estadunidense trató de minimizar la importancia de esta ausencia, argumentando que no todo se puede incluir en cada discurso.

Varios observadores señalaron que al anunciar oficialmente el viaje del presidente a México en marzo, la Casa Blanca está enfatizando la importancia de la relación bilateral y el tema de la migración, aunque principalmente en el contexto de la seguridad fronteriza. Pero la ausencia de estos temas en el discurso, conocido como El estado de la nación, es un indicio de la deslizada importancia política que este gobierno está asignando al tema, destacó Papademetriou. ''Creo que básicamente (Bush) dio a entender que no es un tema sobre el cual vaya a utilizar alguna parte de su capital político'', dijo. ''No siente presión de ningún lado (para elevar el perfil de estos temas)'', estimó quien fue funcionario para asuntos migratorios en el gobierno de Bush padre. ''El nivel de aprobación del presidente estadunidense entre los latinos es igual de alto, o aun más que los demás. Nadie lo está empujando sobre este tema, ciertamente no los latinos''.

Este analista, y varios funcionarios estadunidenses entrevistados, consideran que es poco probable un avance sustancial en el tema migratorio entre ambos países los próximos meses. La reunión entre Fox y Bush en marzo podría servir como una meta para algunos acuerdos sobre el asunto, pero pocos aquí creen que se podrá avanzar mucho en este periodo.