Ť Presentan en Ginebra su postura consensuada
Participan en foro de la ONU delegados del gobierno e indígenas
KYRA NUÑEZ CORRESPONSAL
Ginebra, 29 de enero. México, por intermedio de representantes gubernamentales y de indígenas, presentó su postura política frente al grupo de trabajo de la ONU encargado de elaborar una declaración de los derechos de los pueblos indios. Preocupado por los escasos avances, el país reitera su compromiso para que dicha declaración sea adoptada antes de 2004, apoya el proyecto presentado por la Subcomisión de Promoción y Protección de los Derechos Humanos en 1994 y subraya que ello constituye el consenso mínimo aceptable entre las aspiraciones de las etnias y las garantías universalmente reconocidas a todos los pueblos en el derecho internacional.
Por primera vez en la historia de las negociaciones de la citada declaración, la posición de México fue consensuada entre gobierno y representantes indígenas. Es la primera ocasión, en 14 años de negociación del proyecto de declaración, y en seis años de labores del grupo de trabajo instaurado en 1994, que dos representantes indígenas mexicanos forman parte de la delegación acreditada por el gobierno: Oscar Banda, del Comité de Derechos Humanos Indígenas Yaxkin, y Sol Vicente Vázquez, de la Coalición Obrera Campesina Estudiantil del Istmo (COCEI).
''Nos sentimos medio incómodos'', dicen los delegados indígenas a La Jornada. Su participación con los representantes del gobierno mexicano, a cuyos tres últimos presidentes han debido encarar en el seno de las Naciones Unidas, tiene como antecedente aquel de la mesa de trabajo sobre derechos indígenas establecida en el mecanismo de diálogo de la Comisión Intersecretarial para la Atención de los Compromisos Internacionales de México en materia de Derechos Humanos, recordó Vázquez. Este nuevo proceso permitió igualmente la revisión de la postura frente a este órgano de la ONU y les abrió las puertas para la acreditación (y financiamiento) gubernamental. ''Es más que un gafete, son las garantías ofrecidas para que la nuestra sea una participación plena e igualitaria'', adujeron.
Pero, aclara Banda, ''no somos ni seremos, pura decoración para las Naciones Unidas, ni tampoco estamos dando un cheque en blanco al gobierno''.
México propuso el examen de la declaración sobre los conceptos fundamentales (tierras, autonomía, libre determinación, definición de pueblos), ya avanzados en el seno de la subcomisión, y reflejarlos a partir de los resultados de la Conferencia de Durban. Porque, para el país, ''la participación de los representantes indígenas es una cuestión de principios''.