Directora General: Carmen Lira Saade

México D.F. Martes 29 de enero de 2002

Mundo

Ť Se ignoran las causas del siniestro que empezó en un mercado y se extendió a una armería

Más de 600 personas mueren ahogadas al huir en estampida de un incendio en Nigeria

lag03-080808-pihDPA, REUTERS, PL Y AFP

Lagos, 28 de enero. Más de 600 personas, en su mayoría niños, se ahogaron esta madrugada en la capital nigeriana al caer en un canal cuando huían en estampida de un incendio provocado por la explosión de una armería, el cual, además, cobró otras 12 vidas.

El incendio, cuyas causas no han sido determinadas, se declaró el domingo por la noche en un mercado callejero y se extendió al depósito de armas del cuartel militar, donde se produjeron más de 30 explosiones que sacudieron los barrios de Ikeja y Oshodi, cerca del centro de Lagos.

El presidente nigeriano, Olusegun Abasanjo, se desplazó al lugar del incendio y anunció el nombramiento de una comisión investigadora para identificar a los culpables. "Lo que sucedió en Lagos es una tragedia monumental", declaró Abasanjo en un discurso divulgado por radio y televisión, tras solicitar ayuda para las víctimas.

El diario nigeriano The Guardian informó este día que al menos 12 personas murieron en el incendio de la armería del cuartel de Ikeja y muchos heridos fueron desalojados, además de que las explosiones destruyeron diez edificios, una iglesia, decenas de vehículos en el depósito militar, y causaron daños en un hospital.

Las explosiones provocaron la huida masiva de miles de habitantes que escapaban del incendio en medio del pánico, por lo cual muchos habrían caído al canal de Oke Afa y habrían sido incapaces de huir a nado ante el peso de los que iban cayendo.

El balance de más de 600 personas ahogadas fue proporcionado por la gubernamental Radio Nigeria, mientras por la mañana el periódico Shola Odun afirmó haber contado más de 580 cuerpos, cifra ratificada por testigos.

"Muchas personas han reportado niños desaparecidos, y hay menores buscando a sus padres", dijo esta madrugada el comisionado de la policía de Lagos, Mike Okito.

El ejército era este lunes blanco de duras críticas y muchos lo señalaban como el principal responsable del siniestro. El comandante del cuartel de Ikeja, George Emdin, aseguró anoche a la población que las explosiones no fueron señal de un golpe de Estado y presentó sus excusas a los habitantes de Lagos.